En el islote Despotiko, en el Egeo y cerca de Antiparos, se ha comprobado que uno de los descubrimientos más recientes es un entierro masculino dentro de un santuario perteneciente al periodo Arcaico.
Yiannos Kouragios, arqueólogo que realiza excavaciones en el lugar desde 1997, ha comentado que el entierro se encontraba a 1,5 metros de profundidad con respecto a la habitación principal del santuario. Colocado en posición fetal y con las manos sobre el pecho, el entierro fue realizado de manera bastante pobre, sin ningún ajuar funerario y colocado directamente en la tierra, lo que para los arqueólogos es un gran enigma, puesto que, este tipo de prácticas suele aplicarse en hombres de gran importancia para su colectivo.
Una posible identificación podría ser que ser que se tratara de un obrero que murió mientras se estaba realizando la construcción del santuario, enterrándole inmediatamente después de su muerte. Sin embargo, todavía no se ha podido verificar tal suposición porque debido a la debilidad del esqueleto no ha sido posible moverlo de forma cómoda para realizar los estudios necesarios.
Otra de las sorpresas que tuvo Kouragios fue que el templo está construido sobre otro edificio y junto a una gran cantidad de restos de cerámica.
Debido a los resultados que se han obtenido en el templo Despotiko, el Consejo Arqueológico Central ha llegado a la conclusión de que las excavaciones se alargarán durante cinco años más, puesto que, aparte del propio santuario se han encontrado estatuas de mármol que se utilizaban como ofrendas esparcidas en más de 40 fragmentos.
