Seis meses son los que la UNESCO ha dado al gobierno italiano para informar sobre los avances en problemas y conservación del yacimiento de Pompeya, no obstante otras reliquias históricas de menor amplitud podrían encontrarse en peligro.
Se teme que si el yacimiento de Pompeya pierde su reconocimiento como patrimonio de la humanidad pueda llegar a crearse un efecto dominó sobre otros lugares más pequeños, como es el caso de las ruinas de Villa Poppea consideradas como unas de las más bellas de Italia.
Villa fue la propiedad del emperador Nerón y posiblemente fue utilizada también por su segunda esposa, Poppea Sabina, cuando su marido no se encontraba en Roma. Su estructura se encuentra en deterioro por la humedad haciendo que sus paredes pintadas y mosaicos sean poco a poco destruidas con el paso del tiempo.
La Villa de Poppea se encuentra a pocos metros sobre el mar creando de este modo una vista panorámica del golfo de Nápoles. Sobre un acantilado de 15 metros de altura el acceso a la villa se podía realizar mediante un hermoso paseo por sus jardines.
A pesar de ser conocida por la belleza de sus frescos, jardines y piscina, apenas se halla en las rutas turísticas lo que hace pensar que no se vaya a conservar correctamente en un futuro.