Un equipo compuesto de arqueólogos alemanes y egipcios han dado con nuevos descubrimientos interesantes en el Templo del Sol de Matriya, ubicado en la ancestral ciudad de Heliópolis, que fue uno de los epicentros del culto solar egipcio.
El templo solar que es objeto de estudio fue construido por Kheperkare Nakhtnebet miembro de la XXX dinastía, encontrándose en su interior diversos hallazgos que refieren a diferentes faraones, como piezas de estatuas, mampostería, e incluso algunas piedras preciosas.
Uno de los primeros hallazgos de la misión arqueológica fueron algunos edificios hechos de adobe, junto a varios pisos de ceniza blancuzca donde se hallaban algunas piezas de piedra cuarcita de los tiempos del faraón Horembed, quien fue el último regente de la dinastía XVIII.
Del reinado de Psámetico II hallaron una sección de mampostería, suelos elaborados con piedra caliza, una inscripción de gran tamaño en color rosado, la base de una efigie de Ramsés II, incluyendo una estatua que todavía no ha sido identificada.
Uno de los responsables de la excavación señaló que varios restos de la estatua de Ramsés II han sido encontrados, los cuales fueron realizados en cuarzo además de desenterrar, una pieza del reinado de Ramsés IX.