Recientemente un grupo de arqueólogos encontró la tumba del administrador del templo de Amón conocido como Paneshy, en la que llamaron profundamente la atención las imágenes de este hombre junto a cuatro capillas de las que hablaremos a continuación.
En las imágenes de las paredes en la tumba de Paneshy, se le observa vestido con piel de leopardo, lo que indica que no tuvo hijos; aunque sí estuvo casado como lo muestran las imágenes, en la que se les muestra en compañía de sacerdotes haciendo ofrendas a sus dioses.
Las cuatro capillas adyacentes fueron de personajes notables, aunque la más notable de todas es la que pertenece al fabricante de las láminas de oro del tesoro de faraón llamado Yoeyoe, en la que se hallaron diferentes elementos interesantes, además de estar de mejor estado de conservación.
La tumba poseía relieves con una notable ornamentación en la que se perciben vestigios de mucho color, observándose entre estas imágenes, una escena fúnebre del fallecido para luego pasar a la resurrección.
Otras imágenes de interés, refieren a Yoeyoe junto a cuatro generaciones antecesoras en diferentes escenas, además de la adoración a la diosa Hathor o una imagen del barco del dios Sokar, el más importante de Saqqara.
Sobre la segunda capilla se pueden ver varias imágenes del difunto junto a sus familiares, aunque ya no con la fastuosidad y la conservación de la anterior; algo similar a lo que sucede con las otras dos capillas, de las que no han podido sacarse mayores datos, debido al deterioro.
