Cannington Court, una construcción del siglo XII en el Sur de Inglaterra, es en estos objeto de tareas de restauración. Con ésta, llevada a cabo por la eléctrica EDF Energy en colaboración con Bridgwater College, se quiere convertir al complejo en un centro de formación para trabajadores británicos.
Fue durante estas obras que se descubrieron restos de un priorato, cuya presencia ya vaticinaban los arqueólogos. También se han descubierto restos de pequeñas edificaciones en torno al priorato.
Construido en 1138, no fue hasta el siglo siguiente cuando se convirtió en priorato. Desde entonces ha tenido varios usos, como monasterio para monjas, residencia familiar y colegio. Ya previamente los trabajadores habían descubierto restos de cerámica, conductos de agua y una piedra de molino.
El edificio no está abierto al público general, pero sí que se permiten visitas organizadas. 140 habitantes de Cannington y otras localidades cercanas tuvieron recientemente la oportunidad de ver las edificaciones descubiertas.
En el futuro más inmediato, queda la meticulosa tarea de limpiar, identificar e interpretar los restos y edificaciones hallados. Los restos que se puedan trasladar serán llevados al Museo de Somerset.
Tendrán que darse prisa, ya que se espera que el centro de formación esté abierto antes de final de año. Marc Coltelli, director del proyecto de restauración para EDF Energy, afirma que la empresa está entusiasmada con “respetar la historia de Cannington Court así como dar una nueva vida y propósito al edificio”. Según él, es importante compartir con los británicos tanto el pasado del edificio (en referencia a los descubrimientos) como el futuro (en referencia al centro de formación).
Para respetar el valor histórico del edificio, en las tareas de restauración se han utilizado tareas y materiales tradicionales. Fue necesario reparar mampostería, ventanas y tejado, así como instalar nueva iluminación.
Imagen: Wessex
