La ciudad de Palmira, en Siria, ha sido una de las que más ha sufrido los achaques de la guerra, la cual ha destrozado prácticamente todo su patrimonio histórico y arquitectónico, convirtiendo a esta zona en un páramo de destrucción.
Es una auténtica pérdida para todo el mundo porque han sido destrozados infinidad de monumentos testigos de épocas pasadas, con mucha información y un importante legado que nunca debió ser arrasado.
Ante esta situación es necesaria la ayuda de la comunidad internacional y quien ha dado el primer paso lo ha dado el Museo de Arte Hermitage, de San Petersburgo, quien se ha ofrecido a ayudar para la restauración de los grandes tesoros que tiene Palmira.
De hecho se han adelantado y muchos voluntarios están trabajando en un modelo a escala antes de que se inicie el proceso de restauración. Según declaró el director del museo, Mijail Piotrovski, hay que estudiar a fondo todos los detalles para comenzar la reconstrucción y requerirá de esfuerzos internacionales de gran importancia.

Por su parte, el político Mijail Sgvydkoi, responsable ruso de Cultura, declaró que si sus expertos pudieron reconstruir la ciudad de San Petersburgo, también podrán restaurar Palmira, aludiendo a los terribles daños que sufrió la ciudad rusa durante la Segunda Guerra Mundial.
Serguéi Kuralenk, general ruso, ha declarado que los monumentos arquitectónicos de valor mundial han quedado en gran medida destruidos por las acciones de las tropas del Estado Islámico y se sabe que han minado muchos restos de ruinas grecorromanas que pertenecen a la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, por lo que hay que trabajar a fondo en este asunto.
Una de las piezas arqueológicas que fue destrozada y donde los terroristas grabaron el vídeo en el momento de su destrucción y posteriormente lo publicaron en Internet, fue el León de Al Lat.
Ahora, el responsable de los restos arqueológicos de la ciudad de Palmira explicó que será posible su restauración, dado que se han encontrado muchas de las piezas de esta impresionante escultura de piedra que se remonta al siglo I antes de Cristo.
Asimismo, ha confirmado que tienen previsto hablar con Naciones Unidas para poder llevar a cabo la reconstrucción de la zona occidental de la ciudadela de Palmira así como los templos de Bel y Ball Shamin, aunque se trate de un proceso que no será precisamente rápido y además será muy costoso, pero es algo que hay que restaurar y mantener en el tiempo.