Los Jardines de Cesarea con una dimensión de 1,5 kilómetros cuadrados, se ha catalogado por los científicos como la primera granja de dunas de arena en el mundo.
En este lugar se desarrolló una agricultura a gran escala, utilizándose para la siembra de hortalizas.
Se trata de cerca de 370 parcelas de cultivo distribuidas a la manera de un tablero de ajedrez, donde en primera instancia, se aglomeraron restos de mármol, antiguas monedas, cerámica, vidrio, etc., utilizándose estos depósitos para construir bernas donde aprovecharon el agua subterránea que favorecía las cosechas.
Al ser una granja a gran escala, los científicos piensan que debió utilizarse una amplia mano de obra, trabajando durante más de un millón de días para desarrollar esta granja a gran escala.
Varias zonas de Oriente Medio desarrollaron este tipo de arquitectura, como sucedió en Gaza, Sinaí, el Sahara, entre otros; aunque el único lugar donde se desarrolló en esta magnitud, fue en Cesarea.