Arqueólogos que trabajan en unas ruinas romanas en Ostia Antica, cerca de Roma, se han encontrado con un desagradable descubrimiento al reabrir un yacimiento arqueológico que estaba lleno de símbolos satánicos.
La excavación, dirigida por un equipo americano y canadiense de arqueólogos del Instituto de Cultura Romana, está desvelando información sobre los hogares de la clase alta romana en el siglo IV a.C. y de un mausoleo de 2.000 años de antigüedad, localizados ambos en Ostia.
El lugar fue cerrado durante el invierno pero cuando los arqueólogos lo visitaron hace unos días se llevaron un desagradable descubrimiento. “Cuando reabrimos la excavación, encontramos que se había producido un daño significativo”, ha contado el responsable del equipo al diario ‘Il Messagero’. No se tratada de un acto de vandalismo habitual, el número ‘666’, bien conocido como el símbolo del anticristo, estaba grabado varias veces y había plumas de pájaros y restos de fogatas.
“Además de los espeluznantes restos de rituales oscuros, el lugar estaba lleno de basura. Durante el invierno ha estado durmiendo gente y han estado dejando todo tipo de cosas en las ruinas”, explicaban los arqueólogos del equipo.
