En El Trapiche, lugar de origen maya con influencias olmecas ubicado en el occidente del país centroamericano, el Gobierno de El Salvador y expertos japoneses hallaron dos cabezas zoomorfas de piedra y dos fragmentos de estelas de unos 2.000 años de antigüedad.
En marzo de 2012, mediante la exploración con radar subterráneo, se encontraron una serie de anomalías en el terreno. Después de meses de excavaciones e investigaciones, por parte de un proyecto de la Secultura y de la Universidad de Nagoya (Japón), se toparon con este descubrimiento entre agosto y septiembre, pero ahora es cuando se ha hecho público. La Secultura comunicó que las piezas encontradas se habían hallado al pie de una pirámide de 22 metros de altura.
Con respecto a las cabezas encontradas todavía no se ha determinado exactamente de que se tratan, podrían representar a un jaguar o a un murciélago puesto que sus rasgos son característicos de estos animales, según han comunicado Shione Shibata, director de Arqueología de la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural de la Secultura, y Nobuyuki Ito, arqueólogo de la Universidad de Nagoya.
Los jaguares y los murciélagos estaban relacionados con el inframundo, por ello este sitio puede haber sido un lugar de rituales religiosos, aún así las cabezas van a seguir siendo analizadas para saber con certeza a que corresponden.
Tanto Shibata como Ito han realizado una presentación de las piezas en el parque arqueológico Casa Blanca, en Chalchuapa.