En el interior de una cueva en el municipio de Cocula, al norte de Chilpancingo, los especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han encontrado figuras y fragmentos de braseros que datan del año 700 d.C. En el mismo lugar fueron encontrados fragmentos de cerámica olmeca, pre-olmeca y restos óseos que datan de 1000 y 1200 años antes de Cristo, lo que indica que este sitio fue utilizado con fines distintos entre los que se encuentra el culto funerario.
Las figuras de Mezcala se encuentran completas y se tratan de un hallazgo de gran relevancia ya que hay pocos descubrimientos que tengan como protagonista este tipo de piezas. Estas esculturas son de pequeñas dimensiones, esquemáticas y elaboradas a base de piedra.
La cultura Mezcala se ha venido desarrollando a lo largo del río Balsas ,hacia los límites del Estado de Guerrero, y en ella destaca un estilo arquitectónico propio y sus figuras antropomorfas. Lo que se ha encontrado en los últimos días es una figura humana en piedra caliza que consta de 8 centímetros de alto, sexo no identificable y, algo que la distingue de las demás, no posee ojos rasgados.
No hay muchas figuras de este tipo en el registro arqueológico, únicamente se encontraron siete piezas en los años 80 situadas en Xalitla y otras cuatro en Mezcala y Atzcala entre los años 2005 y 2007, por lo que con esta última ahora hay 12 en total.
El descubrimiento ha sido realizado mientras se llevaban a cabo las obras de mantenimiento y reparación en una carretera cercana y donde ahora INAH está efectuando el rescate de los restos.