En la zona inglesa de Cockermouth un grupo de arqueólogos descubrió una representación del dios griego Silenus, que data del siglo I d.C.
Los estudios arqueológicos demuestran que el busto fue utilizado como una balanza, utilizándose un contrapeso para determinar el peso de los artículos que se sometieran a medición.
Para los arqueólogos un peso de estas características es sorprendente, ya que las pesas de este tipo suelen ser mucho más pequeñas, además de que el representar a Silenus tampoco es muy común.
Otro hallazgo interesante es el de una calzada romana junto a los cimientos de varias casas encontrándose a su vez, numerosas piezas de cerámica que serán estudiadas a profundidad.