Recientemente se han descubierto diferentes carrozas y caballos sacrificados en una tumba de la ciudad Nanchang, perteneciente a la provincia de Jiangxi, siendo ésta la primera que se ha excavado al sur del río Yangtsé.
El equipo de arqueólogos ha descubierto cinco carros tirados por caballos en un excelente estado de conservación. Cada carro contaba con cuatro animales sacrificados en el corredor de acceso a la principal tumba de Haihunhou, los cuales eran pertenecientes a la dinastía de los Han Occidentales, quienes gobernaron desde el año 206 a.C. hasta el 25 d.C.
Hay que destacar que el cementerio de Haihunhou ocupa una extensión de terreno de aproximadamente unos 40.000 metros cuadrados, con ocho tumbas y un importante lugar de enterramiento para nobles y carros, con muros que se extienden por casi unos 900 metros de longitud.
Los arqueólogos sospechan que la tumba principal de este cementerio pertenece a Liu He, el nieto del emperador Wu, considerado como el soberano más importante de la dinastía Han, uno de los periodos más importantes de la historia del gigante asiático.
Durante su vida a Liu He se le fue concedido el título de Haihumou después de haber sido despojado del trono de emperador por el clan real después de haber pasado tan solo 27 días en el trono a causa de su falta de talento y moral.
El arqueólogo Xin Lixiang, reveló que los carros indican que el propietario contaba con el más alto nivel dentro de la dinastía Han. Además fueron hallados más de 3.000 accesorios adornados con oro, demostrando la posición social de este mandatario, así como más de 10.000 artículos fabricados en oro, bronce y hierro así como importantes piezas de jade, tabletas de bambú y de madera.
Ahora, el próximo paso a dar en esta excavación que comenzó en el año 2011 es buscar piezas que se encuentren enterradas junto al féretro del mausoleo central, donde se esperan realizar más hallazgos de importancia
