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Hoy hablaremos de uno de los muebles más característicos de los últimos siglos, el chaise longue, símbolo de la aristocracia francesa desde el siglo XVI hasta el XIX y que, a partir del siglo XX, podemos encontrarlos en casi todos los hogares.
Historia del chaise lounge: el lectus triclinaris romano
Para encontrar el origen del chaise longue, debemos remontarnos a la Antigua Roma, en donde encontramos los famosos lectus triclinaris, los cuales se utilizaban para tumbarse cómodamente o para comer durante los grandes banquetes.
No debemos confundirlo con el lectus cubicularis, que era el mobiliario que utilizaban como cama de dormir.
De todos modos, se usaban de forma indistinta, especialmente entre las familias con menos recursos, siendo muy difícil de diferenciarlos en la mayoría de los casos. De hecho, al ser un mueble que se hacía principalmente en madera, muy pocos han llegado a nosotros.
Sí encontramos como chelong antiguo romano, varios muy bien conservados de metal y otros provenientes de Pompeya y Herculano.
El origen del chaise longue: Francia en el siglo XVI
Desde la antigüedad y hasta el siglo XVI no se cuenta con mucha información sobre un mueble de estas características, momento en el cual se popularizó en Francia entre las clases más altas de la sociedad, quienes se las solicitaban a los artesanos para contar con un mobiliario que les permitiese descansar sin necesidad de retirarse a sus dormitorios.
Ya durante el Rococó, el chaise longue se convirtió en un símbolo de lujo y de la alta sociedad, los cuales se construían con los mejores materiales, los más raros y los más costosos.
Tipos de chaise longue de la aristocracia francesa
Existían tres tipos de chaise lounge bien diferenciados entre sí:
Duchesse brisée
El origen de su nombre es desconocido, y su nombre se emplea cuando este mueble se divide en dos partes: la silla, por un lado, y un taburete largo en otro (o dos sillas con un taburete entre ellas, como variante).
Récamier
Este tipo de chaise lounge lleva el nombre de una reconocida anfitriona de la sociedad francesa Madame Récamier (Juliette Récamier – 1777-1849), una de las personalidades más importantes de la Francia del siglo XIX, responsable de crear círculos culturales en donde participan los nombres más importantes de la política y la cultura.
El motivo de otorgarle su nombre es un retrato de Madame Récamier pintado en el año 1800 por Jacques-Louis David, en donde posa en un diván cuya forma es similar a la de un barco, siendo un mueble creado exclusivamente para su uso en el salón.
Méridienne
Los del tipo Méridienne fueron los más populares en Francia en el siglo XIX, el cual tiene un reposacabezas alto y un reposapiés inferior, que se unen por una pieza con cierta inclinación, dándole así una forma asimétrica.
Su nombre proviene del uso que se solía dar, para descansar a mitad del día, cuando el sol se encontraba precisamente cerca del meridiano.
Curiosidad: el chaise longue y el psicoanálisis
Como curiosidad y para finalizar, debemos hablar de la asociación existente entre el chaise lounge y el psicoanálisis, siendo Sigmund Freud quien inició el uso de este mobiliario con un objetivo muy claro: hacer que el paciente se sintiera cómodo, y a su vez que no viera al analista, quien se situaba detrás de la cabecera del diván.
De este modo, al no tener que enfrentarse de forma directa con el analista, el paciente se sentía más seguro y se desinhibía con más facilidad.
En el Museo Freud de Londres podemos apreciar el famoso chaise lounge que utilizaba el psicoanalista en sus tratamientos.
