La falta de seguridad sigue impactando negativamente en los lugares de interés arqueológico de Egipto. Hace unos meses, Ezbet Kheralla, en el Viejo Cairo, sede de los primeros monumentos islámicos, recibió daños por parte de los residentes vecinos. Ahora, le toca el turno a Dahshur.

Los habitantes de Ezbet Dashur invadieron la zona arqueológica adyacente a la Pirámide Negra del rey Amenemhat III con trampas y armas y excavaron en un cementerio privado para hacerse con los objetos enterrados en la zona, que tenía un cementerio de antiguos nobles egipcios que ya había excavado un equipo alemán que descubrió varios objetos funerarios. Los guardias del lugar trataron de enfrentarse a los invasores, pero sus intentos fracasaron debido a la escasez de armas.
Nasser Ramadan, Director General del emplazamiento arqueológico de Dahshur, explicó que su equipo y él mismo reportaron el incidente a la policía, pero esta no intervino. Incluso el propio Ministro de Estado para las Antigüedades no tomó medida alguna para detener la invasión.
Ramadan añadió que Dashur había sido objeto de matones y vándalos desde la Revolución del 25 de enero por falta de medidas de seguridad, pero previamente no habían tenido ese problema.
Los saqueadores también intentaron cavar en la arena en busca de artefactos que vender en el mercado negro. “Nuestro patrimonio está en peligro y nadie hace nada para rescatarlo”, indicó Ramadan, haciendo un llamamiento a todas las autoridades interesadas en movilizarse para guardar y proteger el patrimonio del antiguo Egipto.
El Ministro de Estado de las Antiguedades, Mohamed Ibrahim, lamentó el suceso, y explicó que la Policía de Turismo y Antigüedades no tiene fuerzas suficientes para eliminar las intrusiones en los lugares de interés arqueológico. Además, el hecho de que los invasores estén armados, complica la situación.
“Vamos a llevar a cabo una investigación para obligar a la gente a no invadir las zonas arqueológicas”, declaró. Dahshur es una necrópolis ubicada en el desierto de la orilla oeste del Nilo, a 40 kilómetros del sur de El Cairo. Es conocido por sus variadas pirámides, dos de las cuales pertenecen al Rey Senefru, fundador de la cuarta dinastía y padre del Rey Keops. Las demás son pirámides y tumbas que pertenecen al Reino Medio, incluyendo la Pirámide Negra de Amenemhat III y la Pirámide Blanca de Amenemhat II.