La inscripción alfabética más antigua de Jerusalén ha sido encontrada por arqueólogos de la Universidad Hebrea. Al parecer, se remonta a la época en la que gobernaron los reyes David y Salomón, 250 años antes del texto más antiguo hasta ahora conocido.
La inscripción que fue encontrada cerca del Monte del Templo no se encuentra en idioma hebreo sino en el de uno de los pueblos que se situaron en Jerusalén por aquel entonces.
El texto contiene una combinación de letras del tamaño de 2,5 cm de altura y que leídas de izquierda a derecha se traducen en las consonantes m, q, p, h, n, l y n. El significado de tal combinación es aún una incógnita ya que no obedece a la semiótica de algún idioma conocido.
Los investigadores creen que podría tratarse del nombre de la sustancia que contenía la jarra o de su propietario. Puede ser que hubiese sido escrito por un individuo no residente de Jerusalén, quizás por los jebuseos.
Anteriormente, había conocido otra inscripción en hebreo y perteneciente a la época del rey Ezequías, ubicado históricamente al final del siglo VIII a.C. En el reciente descubrimiento el grabado fue realizado cerca del borde de la jarra, pero solo se ha encontrado un fragmento de ella junto con los restos de otros seis botes de la misma tipología. La composición de las vasijas ha resultado ser similar después de un estudio realizado sobre la composición de arcilla de cada una de ellas.