La relación entre la Historia, los mitos y las leyendas

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Marcelo Ferrando Castro
Después de estudiar Historia en la Universidad y tras muchas pruebas previas, nació Red Historia, un proyecto que surgió como medio de divulgación en donde encontrar las noticias más importantes de arqueología, historia y humanidades, además de artículos de interés, curiosidades y mucho más. En definitiva, un punto de encuentro para todos en donde poder compartir información y continuar aprendiendo.

Si bien estos tres conceptos definen cosas muy diferentes, existe una cierta relación entre ellos que se hace necesaria para comprender de mejor manera el comportamiento de una sociedad a lo largo de la Historia.

Especialmente, hay una relación muy importante entre Historia y mito pues si bien tienen sus diferencias de base como veremos más adelante, una y otra conviven y forman parte de un estudio más amplio para poder conocer el origen del carácter de una sociedad.

Las leyendas por su parte, son un concepto diferente pese a que en muchas ocasiones, contienen aspectos que le otorgan veracidad.

¿Qué son los mitos?

Podemos decir que los mitos son relatos que intentan explicar diferentes acontecimientos, hechos o fenómenos, provocados en su mayoría por seres sobrenaturales, sean dioses o monstruos.

Mitos como el de la creación en las diferentes culturas (Grecia, Mesoamericanas, de Oriente Medio, asiáticas, etc.), representan claramente aquello que no se podía explicar de una forma lógica como es la aparición de los hombres.

También las encontramos en cada aspecto de la vida diaria de las personas a lo largo de las civilizaciones: la agricultura que se debía a Deméter, los rayos personificados en Thor, la relación entre el estado del mar y el estado emocional de Poseidón o Neptuno (si el mar está revuelto, Poseidón está enfadado), son sólo algunos ejemplos de los miles que podemos tomar de todas las mitologías.

¿Qué son las Leyendas?

Las leyendas, por su parte, son simplemente relatos o narraciones, que pueden estar basados incluso en un hecho real, pero que se “decora”, por así decirlo, con elementos fantásticos e imaginarios propios del folclore de cada país o territorio y que, generalmente, se transmiten de forma oral.

Al situarse en una ubicación y en un tiempo determinados, suelen tomarse como veraces, pero la falta de pruebas o los elementos fantasiosos, hacen que pasen a ser simplemente relatos.

Algunos ejemplos de leyendas conocidas mundialmente son:

  • Monstruo del Lago Ness
  • Yeti
  • La Llorona
  • El Chupacabras
  • El Kraken
  • Hombre Lobo
  • Vampiros
  • Elfos
  • Kelpie
  • Orcos
  • Nahuelito
  • El pájaro del Trueno

La relación entre la Historia y el mito

La Historia es un género totalmente diferente, entendiéndose como una rama del conocimiento. Lo que busca es comprender un momento o una sociedad determinada a través de datos, documentos o cualquier otro elemento que logre demostrar los hechos que se están interpretando.

El mito, por su parte, no busca basarse en documentos, pero es igualmente importante en los estudios históricos y antropológicos porque son los que dotan a las sociedades de su carácter, de su ética y su moral.

El mito es el que otorga un marco en donde englobar la cultura en general y que, a su vez, es el que proporciona la estabilidad a un grupo social determinado.

Como explica Mircea Eliade, “el mito constituye la historia de los actos de los Seres Sobrenaturales; esta historia se considera verdadera y sagrada”.

Esto es que el mito hace referencia a la creación y al camino que se ha llevado para llegar a determinado punto, explicando a su vez cómo se fundaron y cuál ha sido el camino de una institución, de una forma de trabajo o de un comportamiento.

Por eso mismo, es necesario comprender el mito para poder analizar las costumbres de las sociedades.

¿Cuándo nace la diferenciación entre historia y mito? Con el hombre moderno, cuando, como explica Ricoeur, se ha llegado a un punto crítico en el pensamiento que nos permite observar con más objetividad los hechos míticos y los históricos, analizando así que, por ejemplo, no se pueden “sincronizar los mitos con los acontecimientos reales”, o que varían las ubicaciones.

El mito siempre se interpretó como ‘logos’, pero al perderse esa relación dejando de tener sincronicidad histórica, es cuando llegamos al punto crítico de pensamiento y cuando encontramos su verdadero fondo, el ‘mithos’.

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1 comentario

  1. Hola Marcelo,

    Acabo de leer su contenido aquí. Aunque no sé mucho sobre mitos, tengo un poco de conocimiento sobre la lectura de historias. Leí muchos libros en el pasado.

    Pero has ingresado buena información aquí. Mantenga continuar con su buen trabajo. Hay algo acerca de la escritura por favor hágamelo saber.

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