La industria de los eSports es cada vez más grande y por esa razón las empresas apuestan por juegos que puedan tener éxito en este sector.
De este modo, la competitividad entre las compañías crece a pasos agigantados y son pocos los títulos que gozan de la suficiente fama como para mantenerse en el mercado. Aun así, las empresas no pueden confiarse, pues siempre existe la posibilidad de que surja un nuevo “Fortnite” que eclipse a títulos más reconocidos.
Este año se espera que Overwatch, FIFA, LoL y Dota 2 destaquen por encima del resto pero contarán con potentes oponentes.
El atractivo de Overwatch
En los últimos años, el título de Blizzard se ha consolidado como uno de los más relevantes en el mundo de los eSports. Sus carismáticos personajes, como la despiadada asesina Windowmaker o el creativo gorila Winston, se han ganado el favor del público rápidamente.
Existen varios tipos de partidas y de mapas, por lo que en función de los que se elijan se necesitarán más jugadores de un tipo o de otro. En los torneos profesionales, los participantes pueden especializarse en una posición concreta o ser “flex” y ocupar distintas posiciones en el campo de batalla.
El año pasado se disputó la primera edición de la Overwatch League y, a pesar de que los más escépticos planteaban un panorama desolador, lo cierto es que obtuvo excelentes resultados. Tanto es así que la segunda empezará muy pronto.
El pasado 15 de febrero arrancó el primer encuentro, y después de cuatro fases clasificatorias llegaremos a las emocionantes finales. Después de la liga, se podrá disfrutar de la Overwatch World Cup aunque todavía no se han anunciado las fechas.
Europa, sede de LoL
Con el lema “convertíos en leyendas”, League of Legends es un juego de estrategia y acción ideal tanto para los que prefieren jugar en solitario como para los aficionados a las partidas cooperativas. Este año se llevará a cabo la League of Legends European Championship (LEC), que reunirá a los mejores jugadores del mundo en Europa, motivo por el cual casas de apuestas internacionales como Betway ofrece múltiples mercados de apuestas para esta competición.
Allí también encontraremos juegos como Rainbow 6, el famoso multijugador de disparos, o StarCraft 2, el clásico de estrategia.
Otros juegos de batallas como Dota 2 también estarán en el punto de mira el próximo año, al igual que títulos tan conocidos como FIFA, el juego de fútbol por excelencia, o el elogiado Fornite. Entre los candidatos más desconocidos que podrían triunfar, Apex Legends de Epic Games destaca entre los competidores, sobre todo después de haber doblado la audiencia en Twitch, según The Esports Observer.
Los eSports como espectáculo
Las competiciones profesionales de videojuegos ya no son un pequeño nicho de mercado sino que mueven cifras millonarias. Según Europa Press, se alcanzaron 386 millones de espectadores durante todo el 2017. La audiencia disfruta las partidas de la misma forma que un aficionado ve un partido de fútbol.
Parte de este fenómeno tiene que ver con los bellos gráficos de los títulos, en los que se pueden ver escenarios reales, como Egipto en el mapa “Templo de Anubis” de Overwatch.
La inclusión de escenarios reales o incluso históricos en los videojuegos no es algo nuevo, ya que podemos observarlo en exitosos títulos como Assassin’s Creed Odyssey donde recrean la antigua Grecia, o Stronghold Crusader 2, un juego ambientado en las cruzadas. De esta forma, los jugadores pueden elegir entre trasladarse a otra época o sentir que están viajando alrededor del mundo a través de los juegos.
Más allá del atractivo visual, los espectadores también se aficionan a los equipos que disputan campeonatos gracias a su talento y a su carisma. La mayoría de los jugadores profesionales tienen redes sociales para comunicarse con sus fans y realizan directos para ellos en plataformas como YouTube.
De este modo, consiguen formar una comunidad que los anima partida tras partida. Esta interacción hace que los aficionados compren más artículos de sus equipos favoritos y acudan a las competiciones para poder conocer a sus ídolos.
