La paleontóloga de la Universidad de Bristol (Reino Unido), Judyth Sassoon, ha descubierto que los pliosaurios sufrían artritis, una de las enfermedades más extendidas entre los seres humanos hoy en día. Los pliosaurios eran reptiles con forma de ballena que vivieron hace 150 millones de años.
La investigación de Sassoon se basa en el análisis de los restos de un espécimen concreto que mide unos ocho metros de largo y tiene colmillos de 20 centímetros de longitud. Examinando el cráneo, Sassoon descubrió que la mandíbula izquierda estaba erosionada y se desplazaba hacia un lado. Esto, sumado a varias marcas de dientes en la mandíbula inferior, indicaría que el reptil sufrió artritis durante muchos años.
Sassoon entiende que puede resultar “sorprendente” que el pliosaurio pudiera sobrevivir con la mandíbula desviada, pero explica que, aun así, el animal pudo alimentarse a pesar de padecer la enfermedad. La paleontóloga también se pregunta cómo es posible que el resto de su especie no se aprovechara de este “ejemplar debilitado”. Su explicación más factible es que el tamaño de la criatura impondría respeto al resto.
Los pliosaurios tenían cabezas muy similares a la de los actuales cocodrilos, cuerpos parecidos a los de una ballena, el cuello corto y unas extremidades enormes. Estos animales eran unos de los principales depredadores en el medio marino, por lo que las demás especies no los cazaban y podían así alcanzar una avanzada edad.
Esta vejez es la que propiciaría el desgaste en los huesos, ya que otras especies no suelen dar muestras y la artritis es raramente vista en los fósiles. Sassoon comenta: «Nuestros hallazgos muestran que, conforme estos animales envejecían, ellos, al igual que los seres humanos, quienes también son los principales depredadores, sucumbieron a las enfermedades de la vejez. Y esa es una observación interesante y nueva”.
