El Museo de Arte de Ponce, ubicado en la localidad de Ponce (Puerto Rico) acoge desde el pasado día 28 de marzo una pequeña pero muy importante selección de obras del prestigioso artista y grabador francés Gustave Doré bajo el nombre de: Fervor y Fantasía: la Pasión según Gustave Doré.
Esta muestra nos enseñará un gran número de detalles y características tan especiales que siempre han acompañado a este artista y estará compuesta por cinco obras de gran formato que dejan claro la increíble creatividad y también el importante interés estético del artista cuando representa diferentes escenas relacionadas con la vida de Jesús.
La Pasión y fallecimiento de Jesús ha sido uno de los temas que ha servido de inspiración para muchísimos artistas de diferentes corrientes, tanto pintura como escultura o arquitectura entre otras a lo largo de los siglos.
Con su obra, Doré destaca por ser uno de los más destacados creadores. Gracias a declaraciones hechas por el curador Pablo Pérez d’Ors, Doré destaca por una intensa oscuridad cuando quiere representar las escenas de una de las historias que todo el mundo conoce. Además en esta muestra, todos los asistentes podrán descubrir y también entender cómo Doré fue capaz de crear imágenes completamente originales, partiendo de textos de los Evangelios.
Una de las características que siempre acompañaron a Doré fue que la inversión económica que movía su trabajo no procedía de instituciones religiosas sino que venía directamente de clientes privados, lo que le proporcionaba una grandísima libertad creativa, algo que le confirió un enorme éxito comercial.
Además destacó por contar con una gran habilidad para poder apelar a la sensibilidad tanto religiosa como estética. Pérez d’Ors aclaró que: “Al presentar diferentes obras religiosas de Gustave Doré en el contexto, Fervor y Fantasía nos permite conocer mejor a este fantástico artista, pero también le toma el pulso a una época en la que se estaban produciendo muchos e importantes cambios”.
Por su parte, desde el museo han dicho que al contrario de lo que ocurre con otras exposiciones que consiguen reunir grandes cantidades de obras, esta muestra está compuesta solo por tres enormes lienzos, dos grabados y una Biblia ilustrada.
“No deseamos que el público se sienta ciertamente intimidado cuando entran en el Museo. Esta exposición es muy accesible y dado que hay pocas obras, puede visitarse en apenas unos 20 minutos, mirando las obras con cierto detenimiento”.
