Hace aproximadamente 4.000 años la mujer fue incinerada y sus restos envueltos muy cuidadosamente y guardados en una cesta con sus bienes más valiosos. Luego la enterraron en uno de los puntos más altos de la región de Dartmoor, zona relevante para los historiadores y arqueólogos por sus ricos yacimientos arqueológicos.
Dentro del lugar de enterramiento encontraron una pequeña caja que contenía partes de un collar y pendientes de madera, pero lo más relevante fueron la gota y otros 34 objetos de estaño, objetos únicos que suponen las primeras evidencias de la metalurgia en el sur-oeste.
El lugar escogido para llevar a cabo el enterramiento no fue un accidente, puesto que incluso a día de hoy es de difícil acceso.
Es el primer entierro excavado de forma científica en la zona y también el más importante, “Me consumo de entusiasmo con este hallazgo. Nunca esperaba ver algo así en mi vida”, dijo Jane Marchand, arqueólogo jefe de la Autoridad del Parque Nacional de Dartmoor.
La piel en la que estaban envueltos los restos no parece corresponder a ninguna especie animal actual del territorio, si no que los investigadores la relacionan con la piel de un oso cuya especie se extinguió en Gran Bretaña hace al menos 1000 años.
Aunque aún no ha sido posible certificar definitivamente el sexo de los huesos encontrados los investigadores apuntan a que es una mujer de entre 15 y 25 años.
“Yo no debería decir realmente ella, pero dada la naturaleza de los objetos, y el hecho de que no existe un puñal u otra arma de cualquier tipo, tal y como lo conocemos de otros enterramientos de la época, yo personalmente tengo dudas de que no se trate de una mujer joven”, dijo Marchand.
La importancia internacional de este hallazgo viene dada sobre todo por la gran cantidad de material orgánico que ha sobrevivido al paso del tiempo. Incluso se encontraron restos textiles calcinados que podrían ser los restos de una mortaja.
La cista fue descubierta hace más de 10 años cuando una de las últimas losas de piedra que se mantenían en pie se derrumbó. No obstante la excavación comenzó hace tres años, cuando los arqueólogos se percataron de que el sitio se estaba erosionando de forma demasiado rápida y que cualquier contenido que pudiera tener se perdería.
Cuando levantaron la losa superior el descubrimiento se hizo evidente ya que, aunque hay cerca de 200 cistas funerarias en los alrededores de Dartmoor, rara vez se encuentran sus contenidos originales en su interior.
Los arqueólogos están debatiendo si mover las piedras que formaban la cista o dejarlas a manos de la desintegración inevitable. Y aunque la mayoría de los objetos encontrados ya han sido estudiados y catalogados, parece imposible responder al misterio de quien era el individuo enterrado y cómo murió, y sobretodo porqué a una edad tan joven mereció un enterramiento digno de una reina.
