Un grupo de arqueólogos ha encontrado lo que podría considerarse como la pieza de joyería en oro más antigua del mundo. Se trata de una pieza de oro de 24 quilates y con tan solo dos gramos de peso y ha sido desenterrada en el poblado prehistórico de Solnitsata, en Bulgaria.
El mero hecho de que esta pieza haya sido descubierta en el pueblo más antiguo del mundo la convierte en una joya auténticamente única y según informan diferentes medios de comunicación, los expertos aseguran que podría tener alrededor de unos 6.000 años de antigüedad.
Asimismo opinan que los habitantes de este poblado pudieron haber sido los primeros humanos en aprender cómo trabajar el oro y según los arqueólogos, tanto mujeres como hombres podían haber llegado a utilizar esta pieza para demostrar un alto nivel social.
Vassil Nikolov, jefe de la investigación, ha querido destacar que esta joya no fue encontrada dentro de una tumba sino entre ellas, lo que podría dar a entender que hubiera alguna clase de ritual religioso. Asimismo también confirmó que toda la zona norte de Bulgaria pudo estar poblada de sociedades prehistóricas complejas.
Las diferentes investigaciones han revelado que este rincón contaba con casas de dos pisos hacia el año 4.400 antes de Cristo, lo que demuestra lo avanzada que era la civilización que vivió en esta zona durante siglos.
En la región de Varna ya se habían encontrado otros objetos prehistóricos como los hallados en el año 1973 en la necrópolis de Varna, al este de Provadia, donde se encontró el tesoro de oro más antiguo hallado hasta el momento y donde los estudios pertinentes dataron su antigüedad en el 4.400 a.C. aproximadamente.
También se ha dicho que esta joya hubiera podido ser utilizada como moneda antes de que el oro y otros metales fuesen extraídos de las minas por esta civilización en la Edad del Bronce.
En el año 2012, diferentes medios de comunicación informaron del hallazgo de diferentes fortificaciones en Solnitsata, lo que les llevó a especular sobre que este yacimiento contaba con muchas riquezas por descubrir, algo que resultó ser premonitorio dado el hallazgo de esta joya.
Según se ha confirmado, las investigaciones seguirán su ritmo y como suele suceder en esta clase de yacimientos es solamente cuestión de tiempo el hecho de poder llevar a cabo más descubrimientos que aporte una gran información sobre cómo era la vida en aquella época.