Un túmulo funerario excavado en Bulgaria ha dejado intrigados a los investigadores ya que se encontró el primer carro romano en Varna, además de descubrir una serie de estructuras de piedra que no se sabe cuál es su función.
En el túmulo, los arqueólogos han hallado evidencia de que se incineraban a los fallecidos en el sitio, determinándose que no es una familia la que está aquí, sino un rango de personas superior.
Entre los restos de la necrópolis de encontraron numerosos objetos de bronce y cerámica, incluyendo algunas monedas de Antonino Pío.

Un carro de dos ruedas enterrado con un caballo también se ha desenterrado, encontrándose en buen estado de conservación.
El más impresionante de los hallazgos son una serie de estructuras de piedra con forma elíptica construidas muy juntas, pero desconociéndose su uso.