Vida de Gregorio VIII
Nació como Alberto di Morra entre 1100 y 1105 en Benevento. Su padre fue el noble Sartorius di Morra. Se convirtió en monje a temprana edad en Laon como Cisterciense y como benedictino en Monte Cassino.
Alberto se unió más tarde a una nueva orden religiosa, los norbertinos, entre los 20 y 30 años. Fue canónigo en la abadía de St. Martin en Laon y más tarde se convirtió en profesor de derecho canónico en Bolonia.
En 1156, el papa Adriano IV lo nombró cardenal-diácono de Sant ‘Adriano y en marzo de 1158 se convirtió en cardenal de San Lorenzo en Lucina.
Como legado papal del Papa Alejandro III fue enviado para enseñar derecho canónico por toda Europa en la década de 1160 y fue enviado a Portugal para coronar a Alfonso I.
En 1163, Gregorio VIII presentó una ofrenda de reconciliación al emperador del Sacro Imperio Romano Germánico Federico I Barbarroja, a quien el papa Alejandro III había excomulgado en 1160.
De 1177 a 1779, Gregorio sirvió como legado en Italia y en febrero de 1178 fue nombrado canciller de la Santa Iglesia Romana. Como canciller siguió una línea conciliadora hacia el emperador.
Nombramiento como Papa Gregorio VIII y la Tercera Cruzada
El 21 de octubre de 1187, al día siguiente de la muerte de Urbano II, Alberto di Morra fue elegido Papa y tomó el nombre de Gregorio VIII en honor a Gregorio VII.
Sus tratados anteriores devolvieron a la iglesia una relación amistosa con el emperador Federico I Barbarroja. En respuesta a la derrota del Reino Cruzado de Jerusalén en la Batalla de Hattin, Gregorio proclamó la Tercera Cruzada.
Gregorio viajó a Pisa para poner fin a las hostilidades con Génova, para que los puertos marítimos y las flotas navales pudieran unirse a la cruzada. Durante el viaje a Pisa, se detuvo en Lucca y ordenó que el cuerpo del antipapa Víctor IV fuera sacado de su tumba y sus restos arrojados fuera de la iglesia.
Muerte de Gregorio VIII
Gregorio VIII murió en Pisa en diciembre de 1187 después de ocupar el papado sólo 57 días. Fue enterrado en el Duomo de Pisa y sucedido por Clemente III.