Durante los trabajos de excavación para la construcción de un oleoducto en Perú, los trabajadores se percataron de la presencia de una tumba de 500 años de antigüedad que tenía envolturas de fibra natural junto a cuerdas que creaban un patrón geométrico.
Junto a este descubrimiento se encontraron varias ofrendas funerarias, tales como cerámicas y objetos para tomar o guardar el mate, la mítica bebida que todavía hoy se bebe en países australes como Argentina.
La empresa encargada de hacer el oleoducto ha señalado que cuentan con todo lo necesario, para preservar el patrimonio cultural cuando se presenten casos como este.