En varios pasajes del Nuevo Testamento, se cuentan pasajes de Jesucristo, predicando y realizando milagros en una sinagoga en la ciudad de Corozain, Israel, donde los arqueólogos encontraron restos de un templo correspondiente a la época de Cristo.
A inicios del siglo XX, un equipo arqueológico encontró allí una sinagoga del siglo III o IV, no obstante, no habían hallado antes vestigios de un templo del siglo I.
Los especialistas removieron parte del piso del siglo III, dándose cuenta de que había objetos, cerámicas, monedas y otros enseres del siglo I.

De igual manera, los especialistas encontraron rastros de un camino de piedra con 2 mil años de antigüedad, donde pudo caminar Jesucristo cuando iba a estos templos.