Excavaciones recientes en el sitio de Leka al norte del país nórdico, dieron con el impresionante hallazgo de un barco del 700 d.C., en un túmulo funerario donde yacen los restos del rey Herlaug, antes de la era vikinga.
Un mérito del descubrimiento es que hace retroceder la época en que se existían los barcos fúnebres, equiparando al montículo noruego con los barcos fúnebres de Suecia Valsgarde y Vendel.
El poder simbolizado en el entierro de este rey noruego, demuestra que tuvieron una extensa red comercial con presencia en varios territorios, granjeándose una buena fortuna como se demuestran en este enterramiento.