La momia no identificada que durante más de cien años se ha conservado en la Colección Arqueológica del Estado de Babaria, en Alemania, ha sido objeto de un estudio dirigido por Stephanie Panzer. Al parecer, la momia de origen sudamericano presentaba síntomas de la enfermedad de Chagas, pero también signos traumáticos que parecen indicar un posible homicidio.
Utilizando centenares de técnicas biológicas, bioquímicas y arqueológicas (análisis de isótopos, escáneres corporales, identificación molecular del ADN, reconstrucción forense de lesiones, etc.), los expertos han podido ofrecernos más datos sobre este extraño cadáver.
El radiocarbono lo sitúa temporalmente en torno al 1450-1460 d. C. Según las investigaciones, nos encontramos ante una persona de unos 20 o 25 años, con formaciones craneales propias de los incas, que seguía la dieta típica de algunas poblaciones sudamericanas (basada en maíz y marisco) por lo que podría ser originaria de las regiones costeras de Perú o Chile. Así mismo, el material de su peluca está hecho de pelo de llama o alpaca, animales domésticos propios de la zona.
Pero lo más impactante es lo relativo a la causa de su muerte. Aparentemente, los órganos muestran síntomas de la enfermedad de Chagas, una epidemia parasitaria que se transmite a través de la picadura de una especie de chinche común en algunas zonas tropicales de América Latina. El espesor del corazón y los restos genéticos de parásito encontrados en el recto parecen indicar una infección temprana que podría haber provocado su muerte.
Sin embargo, Panzer maneja una hipótesis muy diferente a la razón de un fuerte traumatismo craneal y facial que habría sido provocado antes de la muerte de la joven, algo que parece indicar que fue un homicidio la causa de la misma. Podría haberse tratado, según la investigadora, de un asesinato ritual previo a que el conocido como ‘Mal de Chagas’ consumiera la vida de la joven.
Esta teoría está respaldada por el hecho de que muchas otras momias sudamericanas que fueron víctimas de homicidios rituales presentan similares traumatismos fuertes y directos.