La exposición del Pallazo Reale es el resultado de más de cinco años de trabajo y está a cargo de Pietro C. Marani y Maria Teresa Fioro, dos de los más importantes historiadores especializados en el estudio de los genios del Renacimiento.
La exposición ha juntado hasta 200 trabajos de arte de hasta 100 museos e instituciones del mundo, lo cual le otorga la excepcionalidad a esta muestra, entre ellas, las tres pinturas realizadas por Leonardo del Louvre y 30 pinturas de la colección de su Majestad la Reina Elizabeth II. La Pinacoteca Ambrosina ha prestado para la exposición el famoso Retrato de un Músico y 38 pinturas del Codex Atlanticus.
«La exposición ha sido posible gracias a la colaboración de distintas instituciones culturales de todo el mundo, que han contribuido prestando algunas de las «joyas» de sus colecciones. El resultado es una gran exposición que es la más prestigiosa dedicada a Leonardo durante la Expo de Milán de 2015, y una de las mayores atracciones del programa de la ExpoInCittá«, ha comentado Flippo Del Corno, Consejero de Cultura.
Las pinturas muestran a un Leonardo que no es mitológico ni retórico, sino que muestran las dificultades de su trabajo y sus diferentes facetas como artista y científico.
Las doce secciones de la exposición muestran los temas centrales de Leonardo recogiendo no solo su período de experiencia en Florencia, sino también sus dos estancias en Milán y su traslado a Francia. La exposición narra su vocación interdisciplinar y su constante interés por adoptar una aproximación al estudio de los fenómenos.
Algunas de las secciones distintivas de la exposición son sus pinturas autografiadas, los dibujos y los manuscritos, precedidos por los trabajos de otros pintores, escultores o teóricos anteriores a él, lo cual permite hacerse a la idea del contexto de Leonardo en su contribución a la Historia del Arte, la Ciencia y la Técnica como artista y científico de su tiempo, evitando lo mitológico y lo banal. Las dos últimas secciones muestran la influencia de Leonardo en el Arte Moderno y la formación de la leyenda que le acompaña, la Mona Lisa.
La exposición muestra siete grandes obras maestras de Leonardo: St Jerome, de la Pinacoteca Vaticana, la Madonna Dreyfus de la Galería Nacional de Arte de Washington, la Cabeza de Muchacha de la Galería Nacional de Parma, el Retrato de un Músico y tres pinturas del Louvre: la Belle Ferronière, la Pequeña Anunciación y San Juan Baptista.
Algunos de los códices originales de Leonardo también serán expuestos, procedentes de diferentes archivos y bibliotecas. La exposición incluye un gran número de obras de arte que proceden de importantes museos y bibliotecas e incluso de coleccionistas privados.
