Victor IV (Ottaviano de Monticello: Tivoli, 1095 – Lucca, 1164), fue antipapa de la Iglesia Católica entre 1159 y 1164.
Aliado con Federico Barbarroja, se negó a reconocer al papa Alejandro III y con el voto de nueve cardenales y con el apoyo de los gibelinos, se hizo elegir sumo pontífice, ratificado en el Concilio de Pavia (1160) por Barbarroja.
Sin embargo, en el Concilio de Beauvais, la mayoría de los príncipes de Occidente reconocieron a Alejandro III y Victor IV tuvo que refugiarse en Cremona y en Lucca.