En 2012, un torrente de lluvia dañó parcialmente el área sur del muro de la Acrópolis de Atenas, de manera que el Consejo Central de Arqueología de Grecia, mayor responsable del cuidado del patrimonio del país, autorizó un estudio preliminar de los daños para proceder a su restauración.
El pasado martes 7 de enero, los resultados de dicho estudio, redactado por el ingeniero y arquitecto Anthee Hatziapa, fueron presentados ante la dirección del Consejo. El Servicio de Restauración de la Acrópolis y el ya citado arquitecto diseñaron un proyecto en el que se especificaba que la mayor parte de las reparaciones debían concentrarse en los muros añadidos durante la época otomana.
Los expertos también han apuntado que parte de los daños ocasionados provienen de antaño y se produjeron en los 90 debido a filtraciones de agua por fallos en el sistema de alcantarillado, desastre que se saldó la vida de un antiguo museo en la cima de la Acrópolis, que en 2009 fue reconstruido a los pies de la colina.
El profesor Charalambous Bouras, director del Comité para la Conservación de los Monumentos de la Acrópolis, ha declarado que este proceso de restauración ya tiene “luz verde” para ser llevado a cabo y que las continuas lluvias han impedido su anterior puesta en marcha, añadiendo que las reparaciones deberán aplicarse en un futuro también al ala norte del muro del famoso complejo monumental ateniense.
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