Arqueólogos que trabajaban en excavaciones dentro de la ciudad romana de Deultum, encontraron un amuleto de plata con los nombres de los arcángeles Miguel y Gabriel junto al de Cristo, creando en la última letra un símbolo parecido a una cruz, lo que es un indicativo del cristianismo primitivo.
El amuleto fue hallado en una tumba colocado cerca de la cabeza del difunto, en un periodo que el cristianismo era perseguido por las autoridades romanas.
Debido a su tamaño, el amuleto fue confundido en un principio con un lingote de plata, aunque el análisis mas detallado reveló su verdadero significado.
Este objeto da cuenta de dos rasgos importantes de la ciudad de Deultum. En primer lugar, su imponente riqueza, que permite acceder a una cantidad importante de plata como la hallada en el amuleto.
En segundo lugar, la relevancia del cristianismo en la región, que se convirtió eventualmente en la primera comunidad cristiana dentro del imperio romano, además de ser la primera ciudad en tener un obispo.
