El último año ha sido esclarecedor para el yacimiento arqueológico de Xinjiang, donde se han realizado 135 proyectos arqueológicos que abarcan investigaciones y excavaciones, así como también, 15 proyectos de excavación proactiva en conjunto con instituciones de investigación chinas.
Los investigadores se propusieron investigar con el fin de conocer informaciones nuevas, sobre las mas antiguas civilizaciones del lugar, el papel jugado por Xinjiang en la unificación china y qué religiones florecieron en la región.
En el sitio arqueológico de Husta se encontró un cuchillo con aleación de estaño y bronce, que se ha convertido no solo en uno de los objetos de bronce más antiguos de China, sino que, a su vez, es uno de los primeros objetos de aleación de bronce y estaño de toda la estepa euroasiática.
Otro descubrimiento importante relativo a la Edad de Bronce es un cementerio de hace 4.600 a 4.800 años de antigüedad; allí se encontró un tumulo de piedra de 23 x 25 metros con 1,2 metros de altura orientado al sureste.
Este descubrimiento es importante porque este tipo de tumbas se habían encontrado con anterioridad en las montañas de Altai, a unos mil kilómetros del sitio por lo que se ha extendido el lugar de distribución de estos túmulos.
En el sitio de Husta también se halló evidencia de un caballo domesticado, restos de trigo y mijo, junto a cerámica relacionada a la cultura Andronovo, lo que indica que las relaciones entre el sitio y la estepa euroasiática es muy antigua.
Las ruinas de Wushituer ha sido el epicentro de descubrimientos relacionados al budismo, encontrándose en el lugar varias estatuas y murales budistas, que son vestigios de la llegada de esta religión al lugar.
Las investigaciones continuarán en la región de Xinjiang, siendo los próximos objetivos de excavación la antigua ciudad de Loulan y la antigua Kucha.