Algunos próceres de América no solo destacan por su gran genio militar, sino también por su calidad humana y la comprensión de la vida de los más humildes, tal como sucede con José Gervasio Artigas, quien fue el padre del federalismo en el sur, nombrado cariñosamente el padre de los pobres, y el personaje más importante de la independencia uruguaya.
La vida de Artigas transcurrió por varios conflictos internaciones como la delimitación entre los reinos de España y Portugal en Sudamérica, la guerra de Independencia contra España, las invasiones británicas a la Banda Oriental, además de enfrentarse a las aspiraciones centralistas del gobierno de Buenos Aires; aunque su vida finalizó con tranquilidad en Paraguay.
Primeros años de José Gervasio Artigas
El día 19 de junio de 1764, es recordado como el día en que nació el prócer uruguayo, José Gervasio Artigas, creciendo en el seno de una de las familias más importantes de la ciudad de Montevideo, que para aquellos días formaba parte del Virreinato del Río de la Plata.
Fue el tercer hijo del matrimonio entre Martín José Artigas y Francisca Antonia Pasqual Aznar Rodríguez, quienes tuvieron seis hijos.
Por vía paterna José Gervasio Artigas pertenecía a una familia con historia en Montevideo. Su padre fue el primer Capitán de Milicias en la ciudad, y su abuelo José Antonio Artigas junto a su esposa Ignacia Xaviera Carrasco, fueron de los primeros pobladores de la ciudad de Montevideo en 1726.
La privilegiada posición económica de la familia le permitió a Artigas obtener una formación importante en el colegio San Bernardino regentada por franciscanos, donde aprendió las primeras letras, la aritmética elemental, estudios de gramática latina y la doctrina cristiana.
Aparte de estos estudios, José Gervasio Artigas recibía los conocimientos del campo o la campaña como contaba su abuelo materno, lo que quizás ejerció gran influencia en su actuar posterior cuando cumplió 14 años.
A esa edad, José Gervasio Artigas se retiró a la “campaña” y comenzó a hacer dinero con la compra – venta de ganado junto al contrabando de cueros, una actividad común muy remunerada en esos días, que además de proporcionarle estabilidad económica le dio un importante conocimiento geográfico de la Banda Oriental, que le pondrá en ventaja durante las guerras posteriores.
En ese tiempo, conoció a los indígenas charrúas, aprendió con ellos a montar a caballo, tuvo varios amores y se piensa que tuvo a su primer hijo durante este período.
Inicios de su carrera militar
Las fronteras de la Banda Oriental sufrían por diversos problemas relacionados a los límites de tierra, los desalojos de campesinos o el contrabando, entre otros, hicieron que se formara en Montevideo el Cuerpo de Blandengues, al que se unió José Gervasio Artigas en marzo de 1797, aunque descolló por su valentía en la lucha contra los contrabandistas en la protección de las fronteras, convirtiéndose en el Capitán de Milicias del Regimiento de Caballería de Montevideo.
Para el año 1798 es nombrado Ayudante Mayor del Cuerpo de Blandengues, lo que le permitió formar parte del grupo que estaría junto con los portugueses para fijar los límites.
Esto sucedió en el año 1800, cuando Artigas fungió como el segundo más importante luego de Feliz de Asara, quien había llegado a la Banda Oriental para trazar los límites del imperio portugués.
En ese período, Artigas realizó sus primeras reparticiones de tierra entre personas pobres, siempre pensando en los indígenas, los mestizos, viudas y criollos más desfavorecidos.
Entre 1806 a 1807, vemos a José Gervasio Artigas defendiendo su natal Montevideo de las invasiones británicas, ya que este territorio era muy codiciado por portugueses, españoles, Buenos Aires, e incluso los ingleses, destacándose Artigas en la defensa de la ciudad.
Artigas y los primeros años de la lucha por la Independencia
En 1810 Artigas se convirtió en el Capitán del Cuerpo de Blandengues de Montevideo, aunque luego de tener profundas diferencias con Vicente Muesas, que era el Comandante de Colonia donde estaba Artigas con su ejército; decidió partir a Buenos Aires en febrero de 1811, para formar parte de la Junta Revolucionaria que había depuesto al virrey.
La Junta Revolucionaria le confirió el grado de Teniente Coronel, y se destacó en las batallas de Las Piedras y luego en San José, donde gracias a su genio militar logró derrotar a los españoles en mayo de 1811.
Artigas decide sitiar la ciudad de Montevideo, lanzando una famosa proclama el 11 de abril de 1811 para levantar a los pobladores de la Banda Oriental, aunque este intento de tomar su ciudad natal se verá frustrado, ya que luego de varias derrotas de la Junta Revolucionaria de Buenos Aires, éstos no podrán mantenerse fuertes con dos frentes de guerra abiertos, concretando un armisticio que acabó con el sitio de Artigas a Montevideo.
Artigas y el Éxodo del Pueblo Oriental
Con el nombre de Éxodo del Pueblo Oriental se conoce el episodio en que, miles de familias de Montevideo junto a Artigas, salieron de la ciudad atravesando parajes difíciles como el río Uruguay, para llegar a la zona de Ayuí donde instaló su cuartel general.
Fueron cerca de 16 mil personas con mil carretas y sus animales las que salieron de Montevideo rumbo a esta zona, para evitar las represalias de los españoles.
La Junta Revolucionaria de Buenos Aires nombró a Artigas Justicia Mayor y Capitán de Yapeyú, desde donde organizaría militar y políticamente buena parte de las provincias internas de la Banda Oriental.
La oposición de Sarratea
La junta de Buenos Aires tenía pretensiones centralistas, por lo que esta junta temió el auge de la figura de Artigas en las provincias, decidiendo quitarle parte de su poder al nombrar a Manuel de Sarratea como General en Jefe del Ejército en Operaciones.
Con dinero, intrigas y otras formas, Sarratea logró disminuir la influencia de Artigas entre algunos comandantes del ejército, pero Artigas vencerá en este conflicto, el que le permitirá el 26 de febrero de 1813 volver a sitiar Montevideo, que permaneció en este estado hasta enero de 1814.
Artigas y la Asamblea General de las Provincias Unidas del Río de la Plata
Con el golpe del 8 de octubre de 1812 en Buenos Aires en el que se acabó con el gobierno de la Junta Revolucionaria, el nuevo gobierno quiso llamar a Artigas para representar a la Banda Oriental en 1813, pero él pensó que lo mejor sería consultar a los representantes de la Banda Oriental si estaban de acuerdo con formar parte de la asamblea.
Las Instrucciones del Año XIII
Fue en ese momento en que Artigas presentó su ideario político en forma de condiciones, en las llamadas Instrucciones del Año XIII haciendo un llamamiento a la Independencia de España, que cada provincia se manejara con un gobierno federal, que la Banda Oriental mantenía su soberanía, incluyendo un régimen de igualdad entre las provincias.
Las demandas de Artigas no fueron aceptados, debido a que Buenos Aires no deseaba perder su hegemonía y papel central, lo que terminó con una campaña de desconocimiento de Artigas en 1814, ofreciéndose una recompensa por él de seis mil pesos.
Artigas el Protector
Lejos de acabar con el prestigio de Artigas, la campaña en su contra hizo avivar los conflictos entre sus seguidores y el gobierno central de Buenos Aires, provocando una reacción militar en cadena, donde son derrotadas las fuerzas bonaerenses en las provincias de Entre Ríos, Córdoba, Santa Fe y Misiones, nombrando a José Gervasio Artigas como su Protector, unificándose en la Liga Federal de Pueblos Libres.
Con toda esta fuerza militar de su lado, Artigas pudo hacer frente a las pretensiones de los centralistas, lo que le permitió regresar a Montevideo en 1815.
El «gobierno» de José Gervasio Artigas
Cuando Artigas se hace oficialmente con la Banda Oriental en 1815, inicia una serie de cambios importantes como la instrucción primaria obligatoria, la repartición de tierras entre los desposeídos, e incluso se llegó a crear la Biblioteca Nacional en Montevideo.
Con respecto a las pretensiones de Buenos Aires, se creó el Congreso de Oriente para tratar los asuntos político – administrativos de la Banda Oriental, además de cómo se realizarían las relaciones con Buenos Aires, dirimiéndose los orientales por la Independencia.
Estos hechos no fueron vistos con buenos ojos ni por los unitarios, ni por el reino luso-brasileño, por lo que en 1816, una fuerza militar compuesta por más de doce mil efectivos bien pertrechados y disciplinados, se dirigieron a Montevideo para poner fin al gobierno de Artigas.
Últimos años de José Gervasio Artigas
En enero de 1817 la invasión portuguesa logra hacerse con Montevideo, obligando a Artigas replegarse al interior de la Banda Oriental para resistir en diferentes luchas rurales durante tres años; hasta que en 1820 se producen una serie de derrotas que terminarán por exiliarlo al Paraguay, donde pasó los últimos 30 años de su vida.
El 23 de septiembre de 1850 a la edad de 86 años, José Gervasio Artigas, padre del Uruguay, padre de los pobres y Protector de la Liga Federal de los Pueblos Libres, terminaba su vida humana para iniciar su periplo por la inmortalidad, consagrándose en el panteón de los grandes héroes americanos que lucharon por la libertad.