Un campamento militar romano con más de 2.000 años de antigüedad y emplazado a 2220 metros sobre el nivel del mar, ha sido descubierto por un “detectorista voluntario” gracias al uso de tecnología Lidar, en los Alpes Suizos.
En su momento, el campamento tenía tres fosos de protección y una muralla defensiva, además de que tenía una vista privilegiada de un campo de batalla cercano a unos 900 metros de allí, donde se suscitaron varias batallas.
Para acceder a esta fortaleza, los antiguos romanos debieron utilizar diferentes pasos de montaña, encontrándose a lo largo de los caminos varios enseres de la era romana como zapatos, hondas, tirachinas y armas, entre otros.