Los trabajos de ampliación de una escuela en Stuttgart dieron con un interesante hallazgo arqueológico, que trata de una escultura muy gastada hecha de piedra arenisca, la cual representa una figura humana que se convierte en una serpiente a través de sus piernas.
Las investigaciones han arrojado que la escultura formó parte de una columna donde se representó al dios Júpiter, en una mezcla de creencias germánicas y romanas, con esculturas que ornamentaban pilares de piedra o plazas públicas.
La figura que se representa es un gigante, y los arqueólogos están muy entusiasmados, ya que el hallazgo se relaciona con un descubrimiento anterior en el sitio, conocido como la “Piedra de los Cuatro Dioses”.