En la Edad de Piedra se conocen varios enterramientos rituales de perros, aunque encontrar uno donde los restos orgánicos y el ajuar funerario se encuentren en buen estado es muy dificil, recientemente un equipo arqueológico ha logrado encontrar uno en que el estado de los restos destacan por su conservación.
El hallazgo se hizo en las afueras de Jarna al sur de Suecia, durante los trabajos de excavación para la construcción de un ferrocarril de alta velocidad.
El perro quedó en excelente estado de conservación lo que ha permitido conjeturar que pudo vivir entre los 3 a los 6 años, era un perro macho con cerca de 52 centímetros de altura, encontrado con el cráneo aplastado colocado en una funda de cuero.
Un elemento que llamó profundamente la atención de los investigadores, es el hecho de que se halló en el sitio una daga hecha de hueso colocada junto al cadáver del perro, lo que puede ser un claro indicativo que se trató de un enterramiento ritual.
Se esperan análisis de radio carbono, ADN, entre otros, para conocer mayores detalles sobre la vida del perro.












