El Margaret A. Muir, una goleta de finales del siglo XIX que se encargaba del comercio de granos en el área de los Grandes Lagos en Estados Unidos, ha sido hallada recientemente gracias al uso de tecnología de punto en combinación con el estudio documental.
El día 30 de septiembre de 1893, mientras llevaba un cargamento de granos a granel desde Bay City en Michigan con dirección a South Chicago, el barco terminó hundiéndose durante una tormenta.
La historia cuenta que el capitán junto a su tripulación lograron salvarse al llegar a tierra, aunque el perro que acompañaba a los tripulantes se quedó en el naufragio.
El barco se encontraba en un área transitada por numerosos barcos, aunque fueron los especialistas quienes lograron dar con el naufragio gracias a los registros históricos que hicieron encontrar el área más adecuada para utilizar un sonar de alta resolución, con el que terminaron dando con el naufragio.
Posteriormente, se comenzaron a tomar imágenes de alta resolución con las que se hicieron numerosos modelos 3D, percatándose los investigadores que el barco había sufrido numerosos daños, como por ejemplo el desplome de sus costados hacia afuera.