La célebre película Disney Mulan no es cosecha, al menos no íntegramente, de unos buenos guionistas, si no que se basa en la leyenda china de Hua Mulan.
Hua Mulan aparece en poema narrativo chino “Balada de Mulan”, compuesta en el siglo VI, época en la que China estaba gobernada por la dinastía Tang. Pese a que el texto original se perdió, aún hoy se conservan versiones posteriores.
A lo largo del tiempo se ha discutido si Mulan fue realmente un personaje real o de ficción, pero se desconoce si el poema guarda o no tintes históricos.
¿Quién fue Hua Mulan?
Hua Mulan era una mujer que tomó la decisión de disfrazarse de hombre para ocupar el lugar de su anciano padre en el ejército. Según el testimonio de unos y otros la historia transcurre en uno u otro período.
Los primeros testimonios señalan los años de la dinastía Wei del Norte en los años 368-534, pero para otros la heroína vivió durante el siglo VII. La mayoría de las evidencias señalan a la primera idea.
En la historia original, Mulan se disfraza de hombre para entrar en el ejército en el lugar de su padre y para combatir las invasiones de los Rouran, confederaciones de tribus nómadas que habitaban en las fronteras septentrionales de China interior.
Mulan cumple con muy altas expectativas su trabajo durante 12 largos años de campaña, tanto que el propio Emperador le ofrece altos honores e incluso le ofrece ocupar un importante cargo.
Sin embargo Mulan decide rechazar las propuestas del Emperador y regresar junto a su padre.
Al contrario que en la película Disney, los compañeros de Mulan nunca supieron que ella era en verdad una mujer, y mucho menos Mulan destruyó el palacio del Emperador ni le salvó directamente de los invasores.
Según el antiguo poema la heroína no fue descubierta hasta que sus antiguos compañeros deciden ir a visitarla y la encuentran vestida de mujer.
El poema termina con la imagen de dos liebres, una hembra que representa a Mulan y un macho que representa a sus compañeros, mientras el narrador pregunta al lector si alguien podría distinguirlas.
A diferencia de la película Disney, en la historia del poema no se observan tantos rasgos románticos ni envalentonados ni de la protagonista ni de sus compañeros, como tampoco dragones ni fantasmas de antepasados, aunque estas apariciones y situaciones ni hacen que pierda valor la película ni hacen menos interesante el poema.
Dos versiones que podrían atraer cada una a todos los gustos.