Una antigua tradición en Nueva Zelanda de la tribu Maorí creaba una capa con las plumas del loro verde kahu kakapo, único loro en la tierra que no es capaz de volar, y la muestra sobreviviente que queda de esta tradición es exhibida en el Museo de Perth, luego de haber sido restaurada en el Museo Británico.
Esta capa llegó a Escocia en el siglo XIX, luego de que el cirujano escocés David Ramsay, viajó a Nueva Zelanda proveniente de Perth, logrando obtener la capa que seguramente fue hecha como obsequio a los europeos, o fruto del contacto entre ambas civilizaciones.
El largo período que ha transcurrido guardada en la bóveda del Museo de Perth, junto al hecho de que la capa está hecha con materiales orgánicos, provocaron un profundo deterioro en la capa que debió ser enviada al Museo Británico de Londres para su restauración.
Varias de las plumas habían sido dobladas o rotas, para ello, los especialistas utilizaron papel de morera para sostenerlas, y luego cada parte fue asegurada con adhesivo especial para conservar restos arqueológicos.
Para lograr la restauración final se necesitaron más de 100 horas de trabajo, además de una extraordinaria habilidad manual para lograr el efecto deseado.
La capa está siendo exhibida en el Museo de Perth, que inició sus operaciones el 30 de marzo de 2024.