Tres tumbas del período conocido como Imperio Nuevo han sido descubiertas en Luxor, por un equipo arqueológico compuesto enteramente por personal egipcio, lo que ha llenado de alegría y orgullo a todo Egipto.
La primera de ellas pertenece a alguien llamado: Amón Em Ipet, quien en vida estuvo sirviendo en una finca o un templo dedicado al dios Amón. En esta tumba se aprecían diferentes escenas ceremoniales, además de varios muebles y un banquete dedicado al dios.
Los arqueólogos describieron que en la tumba se aprecia un patio pequeño, una sala cuadrada y un nicho.
La segunda pertenece a un supervisor de silos de grano conocido como Baki. Esta tumba se destaca por un largo corredor que conduce a un segundo patio donde se observa la entrada principal, alí se entra a una sala longitudinal que conecta con una capilla donde estaba el pozo de sepultura.
La tercera tumba perteneció a alguien llamado ES, y se compone de un pequeño patio con un pozo, un vestíbulo y una serie de cámaras inacabadas.
Acerca de este personaje llamado ES, se conoce que ostentó en vida diferentes cargos contándose entre los más importantes el de supervisor del Templo de Amos en los oasis, siendo a su vez alcalde de los oasis del norte y fungió también como escriba.