Cerca de la costas francesas de Ramatuelle, un equipo de la Armada Francesa ha descubierto a 2.500 metros bajo el mar un naufragio del siglo XVI, que posee la particularidad de ser el naufragio encontrado a mayor profundidad en territorio francés.
Los expertos han señalado que se trata de un barco mercante, en el que de encontraron buena parte de la carga, además de que la profundidad a la que se encuentra el naufragio, ha permitido que se conserve casi de manera intocable (mas de 2 mil metros) lo que permite recabar mejor los datos históricos encontrados en el naufragio.
Es una embarcación de 30 metros de largo con 7 de ancho, su carga se componía de unas 200 jarras globulares adornadas con estilos geométricos o con el cristograma «IHS», todas de estilo ligur.
También se encontró el ancla, calderos y cañones del barco, lo que ofrece una imagen privilegiada a un barco mercante del siglo XVI.
Un dato revelador que debe llevarnos a reflexionar es que a pesar de la profundidad a la que se encuentra el naufragio, se encontraron restos de micro y macro plástico, lo que pone en relieve la contaminación que poseen nuestros mares.