Si hablamos de los mejores pintores de París, hay que hablar del barrio de Montmartre, un barrio con ambiente bohemio y desenfadado que atrajo a muchos artistas como Monet, Dalí, Renoir, Degas, Van Gogh y Picasso.
El barrio de Montmartre también es conocido como el barrio de los pintores, tiene pequeñas y empinadas callejuelas que lo hace un lugar bello para visitar, la basílica del Sagrado Corazón y un montón de restaurantes y terrazas.
Historia del barrio de Montmartre
Fue una población independiente hasta 1860 y después pasó a convertirse en un barrio de París, más específicamente el distrito XVIII. A finales del siglo XIX tenía mala fama debido a bastantes cabarets y burdeles que había en este barrio.
Pero algunos pintores y artistas veían en ese lugar un sitio para inspirarse y muchos de ellos se trasladaron allí para seguir creando su arte. Además, la vida allí era más barata y más liberal por lo que crearon una comunidad artística y es por esto que hoy en día el barrio de Montmartre es llamado el barrio de los pintores.
La movida bohemia en el barrio de Montmartre
A finales del siglo XIX hubo unos cuantos artistas rebeldes a favor de la libertad total que se asentaron en el barrio de Montmartre. Cambiaron también las reglas del arte, fue una revolución que llegaría hasta la sociedad, comenzaron a llenar su arte de color e irreverencia al lado de los cabarés que tanto había en este barrio.
El término bohemio se designa a los trashumantes, a los que no son burgueses y no quieren las reglas establecidas por la sociedad, los que quieren vivir en su libertad, y ahí entran muchos artistas y pintores.
Los mejores pintores de Paris
En el barrio de Montmartre, en el momento de la movida bohemia, la pintura floreció de una manera rápida y sin frenos. Algunos de los pintores icónicos de este momento son estos:
Vincent Van Gogh
Este artista estuvo poco en el barrio de Montmartre pero una de sus obras maestras «La noche estrellada sobre el Ródano» son un reflejo de la intensidad emocional y la conexión espiritual que pudo encontrar en él.
Van Gogh era un artista que necesitaba un ambiente bohemio para su inspiración y Montmartre le ofreció ese lugar perfecto el tiempo que estuvo.
Pablo Picasso
Este artista español dejó huella en este barrio de Montmartre. Estuvo sus primeros años en París y le gustaba frecuentar los cafés y estudios que había en Montmartre. Allí conversaba y debatía con otros artistas vanguardistas y se dejaba llevar por ese ambiente bohemio y libre.
Esta movida bohemia se puede ver en sus obras marcando el comienzo de su periodo azul y rosa, donde exploró nuevas formas de expresión y revolucionó todo lo que era la escena artística.
Salvador Dalí
Este artista, conocido por su arte surrealista, también recorrió las calles del barrio de Montmartre. De hecho vivió en él en la década de 1920 y sus ideas vanguardistas comenzaron a nacer, sin duda alguna, influenciado por la movida bohemia del lugar.
Creó obras como «La persistencia de la memoria» que desafían la lógica y exploran el subconsciente, la realidad y los sueños se mezclaron en sus lienzos.
Claude Monet
Claude Monet es el padre del estilo impresionista en el arte y en el barrio de Montmartre encontró también su gran fuente de inspiración. Allí inmortalizó sus molinos de viento y viñedos en obras como «Molino de Montmartre» y «Viñedos en Montmartre».
Este barrio le influyó a la hora de plasmar en sus cuadros la luz cambiante y la atmósfera vibrante que veía en él. Sin duda, marcó un hito en la evolución del arte moderno.
Pierre-Auguste Renoir
Renoir es un artista conocido por sus retratos impresionistas, en ellos se puede ver la alegría de la vida que precisamente encontró Renoir en el barrio de Montmartre.
Obras como «Baile en el Moulin de la Galette» atrapan ese espíritu bohemio que había en Montmartre. Renoir iba a los cabarés de la zona y allí se inspiraba para improvisar y comenzar a hacer bocetos de los que serían después sus obras de arte.
Edgar Degas
Otro maestro del impresionismo que también se colaba por las calles del barrio de Montmartre. Fue famoso también por sus representaciones del ballet, algo que le acercó indudablemente a la vida nocturna y a los bailarines del barrio.
Alguna de sus obras son «La clase de danza» y «Bailarinas en el escenario» donde se puede apreciar la gracia y la intensidad de la escena artística y social del barrio de Montmartre.
Aunque la movida bohemia de Montmartre puede haber perdido su esplendor original, su legado sigue vivo en las estrechas calles y los rincones artísticos del barrio.
Los estudios de artistas como Dalí, los cabarés que inspiraron a Renoir y los lugares donde Monet plasmó la luz de Montmartre son testigos mudos de una época única en la historia del arte.