Un detector de metales que se encontraba en el Valle de Glamorgan en Gales, descubrió una cuchara de baño romana hecha de plata, la cual era utilizada para extraer perfumes, medicamentos o cosméticos, para luego colocarlos en el cuerpo.
El uso de la plata era muy común en el mundo médico antiguo, debido a sus propiedades antimicrobianas con la capacidad de combatir virus, bacterias y hongos.
El museo también informó del hallazgo de un tesoro de siete piezas de bronce hallados en el mismo valle, entre los que destacan dos espadas de bronce y cinco hachas con casquillos de bronce.