Un grupo de arqueólogos descubrió en las ruinas del templo Dimbulagala, la inscripción más grande encontrada en Sri Lanka, que data del siglo II a.C.
Los arqueólogos se percataron de que la inscripción posee un 40% de legibilidad, por lo que se conoció que la cosecha tenía un tributo, además de mencionar la construcción de cabañas o pagodas en honor a diferentes personalidades.
Los arqueólogos se percataron de que en la inscripción se utilizaron 1000 caracteres, entre los que se cuentan 24 caracteres Brahmi y muchos que aun son desconocidos, incluyendo 6 no vistos nunca.
Se cree que la inscripción es del período del rey Lanja Tissa, primer gobernante de Sri Lanka, del 109 al 119 a.C.