Patroclo podía considerarse el mejor amigo del héroe griego Aquiles. Fue reclutado como caudillo griego para la guerra de Troya.
Tras diez años de guerra, Aquiles discutió con Agamenón, comandante de las tropas griegas, por lo que decidió que sus tropas, los denominados mirmidones, se alejaran de la lucha. Esta decisión hizo que el ejército griego tuviera un gran número de bajas a manos de los troyanos.
Poco después los troyanos quemaron algunos barcos de la flota griega.
Por ello, Patroclo trató de convencer a Aquiles de que retomara la lucha y dirigiera a los mirmidones en la batalla, ya que habían hecho prisioneros a parte del ejército griego, pero Aquiles se negó.
Patroclo se hace pasar por Aquiles en la Guerra de Troya
Patroclo había observado largo y tendido la forma de luchar de Aquiles, por lo que para lograr infundir valor entre el ejército, le robó la armadura a Aquiles y vestido con ella acudió a las murallas troyanas para luchar contra ellos, a los que hizo retroceder.
Héctor, príncipe y general troyano, se encontraba luchando junto con el ejército fuera de las murallas de la ciudad. Al ver a alguien que vestía la armadura de Aquiles, pensó que se trataba del héroe griego por lo que se enfrentó a él personalmente.
Finalmente, le dio muerte. Al quitarle la máscara y ver que no era Aquiles, Patroclo le profetizó que éste acabaría con él.
Aquiles enloqueció cuando conoció la noticia de la muerte de su amigo, por lo que desafió a Héctor para poder vengar su muerte. Salió vencedor del combate.
Asimismo, organizó unos juegos funerarios para honrar la memoria de su amigo en los que hubo carreras de carros e incluso se luchó al pancracio, una especie de lucha libre.
Imagen: Dominio Público