Los restos de un hombre que yacían en uno de los lugares más importantes de la iglesia de Jamestown en el siglo XVII, se había estipulado que se trataba de Sir George Yeardley, quien fungió como gobernador de la colonia de Virginia y debido a una lápida que contenía su nombre, se había pensado erradamente que eran sus restos los que yacían allí.
No obstante, un equipo multidisciplinario que buscaba la iglesia más antigua de Jamestown donde sucedieron varios acontecimientos históricos como la primera Asamblea General de Virginia, que ha sido considerado el primer órgano legislativo del Nuevo Mundo, dieron con otra respuesta.
En el presbiterio de la más antigua iglesia se hallaron los restos de un hombre de unos 38 a 44 años, de origen europeo que no tenía muestras de haber realizado trabajo físico muy pesado, además de que en las cercanías se halló una lápida con el nombre del primer gobernador.
Después de varios años de estudios genéticos donde se tuvo que buscar descendientes directos por vía mitocondrial (es decir, una línea directa de descendientes femeninos), lo que llevó varios años de investigación y se dio con diez mujeres que pertenecían al linaje y una de ellas decidió participar en el estudio, se descubrió que no era Sir George Yeardley quien yacía en el lugar.
La ardua investigación continuará a pesar de que no es Yeardley quien estaba enterrado en el sitio, ya que se esperan nuevos descubrimientos en el lugar.