Índice
El Barroco fue un movimiento artístico que abarcó a finales del siglo XVI hasta principios del siglo XVIII, sucesor del Renacimiento y heredero del escepticismo que abarcó el Manierismo.
Su empleo se extendió a Italia, Francia, España, Austria y en toda América Latina.
Su popularidad crecía, debido a que expresaba una sensibilidad compleja, crítica, desengañada y pesimista, debiéndose a que las representaciones de la época en la literatura y en el arte se vinculaban a lo cultural, psicológica y socialmente; además, desde el punto de vista económico y político.
¿Qué es el arte Barroco?
El Barroco llevó a cabo un estilo artístico despreciado y rechazado por los historiadores del momento al ser etiquetada anticlásica, al igual que había ocurrido con el Arte Gótico, que caracterizaba al manierismo, manifestando en las obras el movimiento de todos los sentidos, por lo que fue considerada la técnica como ostentosa y exagerada.
Su desarrollo estuvo implícito en diversas disciplinas, como la música, la pintura, la literatura, la escultura y la arquitectura.
En ellas, tres elementos eran indispensables para considerarse parte del movimiento, tales como: la espectacularidad, el efectismo y la emocionalidad.
Ciertamente, el hecho de que el nacimiento del barroco coincidiera con el Renacimiento, hace que ambas posean similitudes. Pero la extravagancia de éste es lo que marca la distinción en sus obras, a pesar de que usen colores intensos, temas mitológicos, religiosos y realistas.
Origen del arte Barroco
El arte Barroco surgió por la Iglesia Católica, debido a que las ideas racionalistas y las reformistas intentaban apartar la religión de los escenarios artísticos, al mismo tiempo que en el día a día de los ciudadanos.
Por lo que, el origen del Barroco posee dos causas: el religioso y el político, al igual que las razones sociales y psicológicas.
Razones políticas y religiosas
En el primero de los casos, la Iglesia Católica actuaba en contra del protestantismo y para ello, mandó a edificar templos que tuvieran exceso de esculturas religiosas.
En ello, estaban implicados Reyes y emperadores que buscaban el éxito de la Iglesia por lo que todas las esculturas, las pinturas y los diseños arquitectónicos fueron encargados por tribunales en Europa.
Además, estaba prohibido que los artistas se salieran de dicho orden, por lo que no podían representar temas paganos en sus obras; en este sentido, no había escenas de fiestas o desnudos, sino escenas conservadoras.
Razones psicológicas y sociales
Por otro lado, la vida en aquella época desbordaba muerte y sufrimiento producida por la guerra. Los artistas del estilo Barroco, ante este panorama, intentaron experimentar con el color y el movimiento.
Es por esta razón que las obras provenientes de este periodo intentan transmitir agitación y amor por la vida a partir del drama, agregando sombras, remolinos, diagonales ascendentes, colores suntuosos y espirales, haciendo lucir sus creaciones espectaculares y magnificas.
Asimismo, se explica que a diferencia del Renacimiento, este movimiento dominaba un pensamiento desengañado y pesimista, como refutación al contexto histórico que se estaba viviendo.
Características del arte Barroco
Las características del arte Barroco están constituidas por la exageración, los detalles y el dualismo.
Efecto inconexo
El Barroco quiso promover, a diferencia del Renacimiento, un efecto incompleto o de obra abierta, en vez de cerrar la obra en sí misma. Esto significó la posibilidad de expresar la curiosidad por la trascendencia y la infinitud.
Centros múltiples
En el Barroco las obras no poseían un solo centro, sino varios centros múltiples, los que frecuentemente producían composiciones elípticas. Esto, puedo reflejarse en las diversas disciplinas del arte, por medio de sus propios recursos.
El contraste
En las variadas disciplinas artísticas este estilo deslumbra su gusto por la búsqueda del contraste, lo que en general se produce a partir del claroscuro.
Se aleja de las prescripciones filosóficas
El Renacimiento representaba las prescripciones filosóficas que promovían equilibrio y mesura, mientras que el Barroco prefería representar en sus obras los temperamentos interiores y las pasiones que había en cada personaje, al igual que en todo el conjunto de las piezas.
Movimiento, tensión y dinamismo
El hecho de la tensión, el dinamismo y el movimiento era indispensable en el arte de la época. No era de interés el reposo, sino las tensiones entre los sonidos, las formas, los conceptos y las palabras.
Horror al vacío
Horror al vacío u horror vacui, es una manifestación que prefiere los acabados recargados y abigarrados, con los que desea rellenar cada espacio de las obras.
Pintura Barroca
La pintura Barroca representa, al igual que las otras expresiones artísticas, la tensión y el dinamismo de la composición.
Esto principalmente se reflejó en el uso de planos abiertos, puntos de fuga, ornamentación excesiva, composiciones asimétricas, gusto por el color y los detalles.
Todos ellos aparecieron al igual que nuevos géneros pictóricos, como el vanitas, el paisaje, los bodegones y los retratos colectivos.
Los bodegones
La naturaleza muerta o los bodegones, son aquellos animales muertos, flores, vegetales y objetos, que en países prósperos reflejaban la prosperidad; mientas que en los países que estuviesen en crisis, expresaban carestía.
Paisajes
El país o paisaje se lleva a cabo tras la transición entre el Renacimiento y el Barroco, a pesar de que siempre ha existido como compañero de escenas y retratos.
Vanitas
Vanitas tiene que ver con la ligera variación de los bodegones que supone la atención de la fugacidad del tiempo y la vanidad, por lo que se incluye un elemento más como calaveras, velas consumiéndose, alimentos en descomposición, pompas de jabón, etc.
Retratos colectivos
Los artistas solían retratar a varias personas dentro de un mismo lienzo. Habitualmente poseían relación con escenas reales en donde un grupo de personas se reunían por motivos profesionales, oficios y ocios.
Arquitectura Barroca
En la arquitectura del Barroco, existía la tendencia de colocar en el exterior de los edificios movimiento, por medio de alternancias de líneas convexas y cóncavas, que dan la apariencia de una fachada alabeada.
Esto se llevaba a cabo principalmente porque era una época en la que predominaba el gusto por los fuertes contraste, lo recto y lo curvo, lo cerca y lo lejos y lo claro y lo oscuro.
Dicho trabajo, pretendía diluir los parámetros espaciales y crear una perspectiva de infinitud y continuidad, por medio de la forma abierta de tal dinamismo, que implicaba volúmenes segmentados y el suavizado de las líneas.
Por otro lado, seguían utilizándose elementos clásicos del Renacimiento, pero con detalles diferentes: los frontones eran quebrados, las columnas clásicas, pero ahora no adosadas, sino salomónicas con volumen pleno, que hacía que los fustes se observaran retorcidos en sentido helicoidal.
Incluso, era habitual que se les adjudicaran diversos ejes o centros de construcción según el diseño arquitectónico a realizar.
Esto se debía a que rechazaban colocar solo una cruz griega, un cuadrado y un círculo, que crear un efecto policéntrico, mediante atrevidas y novedosas combinaciones de dichas figuras.
Escultura Barroca
En contraposición al orden que presentan las esculturas del movimiento renacentista, el Barroco trabajaba realizando composiciones menos equilibradas y con más movimiento, por lo que se evitan las figuras simétricas y se agregan más pliegues y contrastes luminosos.
Asimismo, se les agregaba un toque más de expresionismo a los rostros, a los cuales se les añadía sentimientos por medio de tensiones, peinados, gestos, etc., que correspondían con mártires, ángeles y santos, como también dioses paganos y héroes.
Cada obra culminada se utilizaba principalmente para decorar los diseños arquitectónicos tanto en el interior como en el exterior.
Literatura Barroca
La literatura Barroca se constituyó por el interés en los detalles, la exuberancia y los efectos de aquella época.
Las figuras literarias utilizadas fueron la elipsis, la antítesis, el hipérbaton, la adjetivación, la metáfora y la perífrasis.
En relación a los géneros, le dio continuidad a los llevado a cabo en el renacimiento, a pesar de que se desencadenó el crecimiento novedoso de la dramaturgia, principalmente en la tragicomedia y la comedia, las cuales desafiaban la rigor clásico de las tres usuales unidades dramáticas.
Seguidamente la literatura Barroca posee dos corrientes importantes: el conceptismo y el culteranismo.
El conceptismo
El conceptismo era aquel que valoraba el contenido al igual que la forma. Sus principios eran basados en la exposición de los conceptos y las ideas, por medio del ingenio verbal. Francisco de Quevedo fue uno de sus máximos exponentes.
El culteranismo
El culteranismo por su lado, valora la forma por encima del contenido. Por lo que fue más deseado en referencias literarias religiosas y retóricas. Luis de Góngora fue uno de sus máximos representantes.
Máximos representantes del arte Barroco
Muchos fueron los artistas que crearon un gran cúmulo de obras durante el barroco, tanto pintores, como escultores y arquitectos, y aún más en cuanto a literatura. Sin embargo, mencionaremos algunos también relevantes y de inspiración incluso hasta en la actualidad.
Michelangelo Meresi da Caravaggio 1571-1610
Caravaggio fue un pintor Italiano del movimiento Barroco, dedicado a la pintura entre Nápoles, Roma, Sicilia y Malta entre 1593 y 1610.
Su técnica demuestra una combinación tanto en lo emocional como en lo físico, tras una observación realista de la humanidad, en el que aplica el uso dramático del claroscuro, el cual se conocería como tenebrismo.
Sus obras más importantes son: Los discípulos de Emeús, Cabeza de Medusa, La Buenaventura, Baco enfermo, entre otras.
Rembrandt Harmenszoon van Rijn 1606-1669
Rembrandt fue un grabador y pintor de origen neerlandés. Es considerado actualmente como uno de los mayores representantes del arte Barroco y de los países bajos.
El aporte que realizó con su pintura, es lo que los expertos llaman: “La edad de oro”, el cual fue el momento de mayor éxito de la influencia política, científica, cultural y comercial. Sus obras más importantes son: El joven Rembrandt, El pintor en su estudio, El filósofo en meditación, entre otras.
Gian Lorenzo Bernini 1597-1680
Lorenzo Bernini fue un escultor, pintor y arquitecto de origen italiano, sucesor de Miguel Ángel por su habilidad para esculpir el Mármol.
Es considerado el más importante de su generación en el arte escultórico Barroco. Esto, debido a que poseía la habilidad para crear escenas con drama y narrativa, al igual que de captar estados intensos y psicológicos, que transmitían grandeza.
Entre sus obras más importantes están: Palacio Barberini, Éxtasis de Santa Teresa, Plaza de San Pedro e Iglesia de San Andrés del Quirinal.
Luis de Góngora 1561-1627
Luis de Góngora fue un dramaturgo y poeta, perteneciente al Siglo de Oro, quien sería el máximo exponente de la literatura en toda América y Europa, simplificado como gongorismo o culteranismo.
Sus obras más representativas son: Fábula de Píramo y Tisbe, Fábula de Polifemo y Galatea, Las Soledades, entre otras.
Lope de Vega 1562-1635
Lope de Vega fue también un dramaturgo y un poeta importante de la época del Siglo de Oro.
La extensión de su obra lo nombró como un autor prolifero de la literatura universal, además de ser quien encontrara nuevas fórmulas en el instante en el teatro estaba a punto de ser un fenómeno cultural de masas.
Entre las más destacadas están: La arcadia, La Dorotea, Los romances, Laurel de Apolo, Isidro y La hermosura de Angélica.
Otros autores destacados
La lista de autores destacados del Barroco abarca todas las artes y las ciencias, incluyendo entre ellos a: Isaac Newton, René Descartes, Galileo Galilei, Francis Bacon, William Harvey, Diego Velázquez, Bartolomé Esteban Murillo, Antonio Vivaldi, Händel, Domenico Scarlatti y J. S. Bach, entre otros.
Obras más representativas del arte Barroco
El Barroco fue un periodo de mucho auge artístico, esto quiere decir que muchas fueron las obras que se realizaron, y múltiples de ellas fueron y siguen siendo de influencia para diversos artistas.
Sin embargo, nos evocaremos solo a algunos de ellos para poder comprender un poco las características de este movimiento artístico.
Los discípulos de Emaús de Michelangelo di Caravaggio (1602)
Los discípulos de Emaús es una pintura realizada en 1602 por Michelangelo di Caravaggio en óleo sobre lienzo. Actualmente se conserva en la Galería Nacional de Londres.
El artista volvió a pintar una segunda versión del mismo tema en 1606, la cual se conserva en la Pinacoteca de Brera en Milán. Dichas obras describen la escena del Evangelio de Lucas.
Los personajes representados son dos de los discípulos de Jesús, Cleofás a la izquierda, Santiago a la derecha, junto a otro de ellos de espaldas. Se muestra el momento exacto en el que observan a Jesús resucitado. Además, se observa un momento preciso como si de una interrupción se tratase, típico del artista.
Ambos discípulos muestran algo de asombro, Cleofás se ha levantado, mientras el que se encuentra de espaldas está con intenciones de seguirle, en medio de una suerte de almuerzo-cena típica al unir la naturaleza muerta común del barroco, con todo ese ambiente lúgubre creado por la iluminación creando un perfecto contraste.
El pintor en su estudio de Rembrandt (1626 – 1628)
El pintor en su estudio es un cuadro realizado por Rembrandt entre 1626 a 1628; hecha en óleo sobre lienzo y conservada en el Museo de Bellas Artes en Boston. La obra alude a la importancia que posee el idear y el pensar para la creación de una obra.
Más claramente, es un retrato del estudio de un pintor, aunque hasta ahora no se sepa si era del mismo artista. Uno de los claros ejemplos del Barroco se muestra acá, aquella penumbra generada por el juego de luces que penetra desde el borde lateral izquierdo hacia el derecho.
En el fondo del borde superior izquierdo la penumbra, aquella sombra tan característica del barroco, así como los tonos empleados, carente de color, para lograr aquella emotividad particular de tal movimiento.
Éxtasis de Santa Teresa de Bernini (1645 – 1652)
La escultura llamada Éxtasis de Santa Teresa realizada por Bernini, posee una altura de 340 cm y actualmente permanece en Italia-Roma, en la iglesia Santa María de la Victoria.
Esta obra logra reflejar el momento en que Santa Teresa de Ávila recibe el místico don de la transverberación.
Como una de las obras más significativas de este periodo artístico, especialmente por esa intensidad dinámica y esa fuerza dramática que expresan los personajes, sin dejar de lado el tratamiento tan exquisito del mármol.
Basta con observar los dobles del ropaje de los personajes sus expresiones faciales y aún más, el claro clímax que muestra Santa Teresa, que podría llegar a ser hasta erótico, se juega entre el dolor y el placer en medio de una devoción, evocando todo un terreno espiritual significativo para ese entonces.
