Arqueólogos han dado con un hallazgo sin precedentes en la zona de Westfalia, donde encontraron los restos de dos templos romanos dentro de una estructura militar, algo que no es común encontrar en asentamientos militares romanos.
El sitio se piensa se construyó en tiempo del emperador Augusto, tomando el nombre de Aliso convirtiéndose en una importante fortaleza militar.
Los edificios se construyeron con una base de arcilla, aunque también utilizaron madera creando para los templos una planta rectangular de 30 metros, con una entrada de 5 metros de ancho y dos grandes columnas de madera.
En el sitio también se evidenció la presencia de una zanja circular, que tiene una decoración a base de aceite.