Actualmente es muy común probar suerte en juegos de azar, dada su facilidad y acceso en línea y la posibilidad de jugar con pequeños depósitos de dinero. Por otro lado, las apuestas deportivas de fútbol online son otro gran aliciente para los aficionados a este deporte, que pueden disfrutar de realizar predicciones sobre sus equipos favoritos, además de ganar un dinero extra.
Pero, ¿de dónde viene la afición por este tipo de entretenimiento? ¿Quieres realizar un recorrido sobre el origen y evolución de los juegos de azar y las apuestas deportivas?
¿Cuáles fueron los primeros juegos de azar?
Según diversos estudios de restos arqueológicos, los primeros juegos de azar se remontan a la Antigüedad, a las civilizaciones de Sumeria y Asiria, en las que utilizaban huesos de animales para realizar juegos similares al dado de hoy en día.
Asimismo, tanto en América como en la India, se utilizaban juegos de pelota con carácter religioso, que se basaban en el azar.
No obstante, la verdadera fuerza de los inicios del juego la podemos asociar a Grecia y Roma, ya que aparece reflejado en diversos textos grecorromanos.
Más adelante, en la Edad Media, podemos destacar la popularidad de los juegos de cartas, que han ido evolucionando hasta la actualidad.
¿Cuándo comenzaron las apuestas?
Las apuestas están muy ligadas a los juegos de azar. Podemos situar sus inicios en los Juegos Olímpicos de la Antigua Grecia, en los que sus espectadores realizaban apuestas sobre batallas y carreras.
A su vez, en la Antigua Roma también eran muy comunes las luchas de gladiadores, que congregaban un gran público que no dudaba en defender y apostar por sus favoritos. Incluso existía una ley reguladora de las apuestas, que permitía las mismas, a pesar de prohibir algunos juegos de azar.
¿Cuáles fueron las primeras apuestas online?
Si hablamos de la primera apuesta realizada en línea debemos remontarnos al año 1996. La responsable fue la compañía Intertops, que contaba con una licencia de Antigua y Barbuda. En el año 2000 desarrolló un software que permitía realizar apuestas online por medio de dispositivos móviles. En el año 2002 se realizaron las primeras apuestas en vivo.
¿Cuándo se introdujeron las apuestas deportivas en España?
Las primeras apuestas deportivas en España son las que se podían realizar en La Quiniela. En sus inicios, en el año 1946, había que acertar tanto el resultado del partido como los goles marcados por cada equipo.
Dos años después se modificó a su estado actual, es decir, que solo se marca el resultado del partido, estableciendo 1 X para el empate, un 1 para la victoria local y un 2 para la victoria del equipo visitante.
¿Cómo ha sido la evolución de las apuestas deportivas?
No cabe duda de que la posibilidad de apostar en línea revolucionó el mercado de los juegos de azar y las apuestas deportivas.
Actualmente, se puede apostar a una gran cantidad de disciplinas deportivas, desde cualquier dispositivo, a cualquier hora y, en algunos casos, a tiempo real. Es decir, mientras se desarrolla un acontecimiento deportivo.
Esta gran comodidad y fácil accesibilidad propicia que cada vez más personas se animen a probar este tipo de ocio digital, lo que ha supuesto una gran expansión del mercado de las apuestas. Ello es posible gracias a que las casas de apuestas en línea han sabido aprovechar los avances tecnológicos para adaptarse a las nuevas necesidades de los consumidores.
¿Cual es el futuro de las apuestas?
Una de las principales tendencias actuales en las apuestas deportivas son las apuestas en vivo, que ya están completamente instauradas en las webs de juegos de azar, así como las aplicaciones móviles adaptadas a los diferentes sistemas operativos. Asimismo, la realidad virtual y la realidad aumentada cada vez están más presentes en el juego online.
Por tanto, si analizamos cómo será el futuro de las apuestas deportivas, debemos destacar que, con toda probabilidad, la inteligencia artificial alcanzará un gran protagonismo.
Ya se utiliza con diferentes propósitos, como con algoritmos de aprendizaje automático para analizar fielmente los resultados de los eventos o como detección de posibles actividades o prácticas fraudulentas, lo que mejora la seguridad de esta industria.
