Cerca del sitio arqueológico de la Torre de Meira en Galicia un grupo de arqueólogos encontró un pene de piedra de seis pulgadas, que luego de someter a diferentes exámenes determinaron que se utilizó para afilar armas de hierro en el siglo XVI.
La conclusión de utilizarse como herramienta para afilar, vino luego de observar patrones de desgaste a un lado de la piedra que dieron cuenta de su uso.
Sí bien se sabe que la piedra fálica se utilizó para afilar, su connotación simbólica no está del todo clara, aunque los investigadores piensan que se relaciona con armas, la masculinidad y la violencia, en un período histórico difícil en la zona, ya que esta región a finales del siglo XVI estaba luchando contra el rey y el sistema feudal.